En la oficina en casa la imagen de la videoconferencia se congela, los sitios web tardan una eternidad en abrirse, la película en streaming se ralentiza, las imágenes se pixelan. Ello se debe a que en plena pandemia por el coronavirus casi todo el mundo está en sus hogares y conectado a Internet.
Una situación que se está convirtiendo en la norma en tiempos de crisis del coronavirus y está causando un aumento general del tráfico de datos en Internet.
Dado que la transmisión de video en directo requiere mucho ancho de banda, reducir la resolución de la imagen alivia el flujo de la carga. La calidad de la resolución puede ser configurada en casi todos los servicios de streaming, plataformas de vídeo y mediatecas.
Redes en cuarentena: más videoconferencias, streaming y Porn Hub
Aunque los proveedores de Internet han asegurado hasta ahora que pueden asumir el aumento de tráfico, la mayoría de los principales servicios ya han reducido temporalmente la velocidad de transmisión de datos de video.
Router: proximidad y uso
Con solo acercar el ordenador portátil, la tablet o el smartphone al router la señal inalámbrica mejora tanto que la mayor parte de las interrupciones o pérdidas de calidad de la transmisión de datos desaparecerán.
En casa, vale la pena plantearse quién y en qué momento está ejecutando aplicaciones con un uso intensivo de datos, aconseja el portal especializado Heise online. Priorizar su uso puede ser de gran ayuda: si la importante videoconferencia está a punto de comenzar, los demás deben detener sus flujos de video hasta que ésta termine.
El tradicional cable, más veloz
Si aun así no funciona, los expertos aconsejan conectar directamente el portátil al router a través de un cable Ethernet. Si su dispositivo no cuenta con un puerto Ethernet puede ser un buen momento para comprar un USB-Ethernet -unos 20 euros (21,80 dólares)-. La inversión se verá recompensada con una conexión gigabit estable.
Nada desdeñable si lo comparamos a la velocidad de transmisión de una conexión inalámbrica cuando el dispositivo está alejado del router: unos escasos megabits por segundo.
Además, un cable Ethernet puede ayudar a resolver al mismo tiempo interferencias con redes inalámbricas de proximidad -en el caso de la oficina en casa, las utilizadas por los vecinos-.
Radiodifusión en tiempo real
Quien quiera aligerar aún más la carga de las redes puede utilizar otro tipo de tecnología de radiodifusión. El portal de telecomunicaciones "Teltarif.de" recomienda sencillamente ver y escuchar lo que la televisión y radio emiten en tiempo real. Escuchar antiguos CDs o grabaciones en MP3 "olvidadas" son otras opciones para no sobrecargar el tráfico de datos.
Para quienes hace tiempo que no hayan visto o escuchado programas en tiempo real: la televisión llega a casa bien a través de antena digital terrestre (DVB-T2 HD), por satélite (DVB-S/S2) o por cable (DVB-C/C2).
El encendido de la TV revivió con la pandemia
Por su parte, la tecnología IPTV, aunque se transmite por Internet -como por ejemplo la ofrecida por Telekom con Magenta TV o por Vodafone con Giga TV- también constituye una alternativa ya que la tecnología de multidifusión utilizada para su transmisión apenas ejerce presión sobre las redes.
Funciona: Antena para TV digital terrestre
Los piezas necesarias para sintonizar la DVB-T, -S y -C suelen estar incorporadas en las televisiones más recientes, de lo contrario, como en el caso de la IPTV, se requiere un dispositivo receptor extra y en el caso de televisión por satélite, la consabida antena parabólica.
Más sencillo que todo eso: una pequeña antena, es todo lo que hace falta para disfrutar de la televisión digital terrestre -cuando hay buena cobertura-.
Para oír la radio, se dispone de radiodifusión analógica (VHF) y digital (DAB+). La radio analógica puede incluso escucharse con muchos teléfonos inteligentes y tablets si el fabricante ha instalado una aplicación adecuada. El cable de los auriculares sirve en este caso como antena.
Reencuentro: Música en formato digital
Aunque la transmisión de audio no requiere tanto ancho de banda como la de video, no hay que olvidar que es posible escuchar música sin utilizar Internet. Seguro que muchos hogares pueden rescatar de algún rincón soportes y reproductores de música digital "olvidados".
Un tocadiscos de vinilo, un reproductor de CD o audios grabados en MP3. ¡Quién sabe!, incluso puede que alguien rescate de algún baúl un DVD o disco Blue-ray de su grupo favorito.
FUENTE. DPA