El gobierno de Venezuela denunció un "plan de la derecha neofascista" que amenazaba la vida del líder chavista Nicolás Maduro para justificar la cancelación de su viaje a Argentina para participar de la VII Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC).
La presencia de Maduro en la cumbre fue criticada por ciertos sectores que consideran que su responsabilidad en la crisis que padece el país le incapacita para estar presente en este tipo de reuniones y al mismo tiempo que le legitima internacionalmente tras varios años reconociendo a Juan Guaidó como presidente.
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En ese sentido, el mandatario venezolano denunció que la oposición argentina elaboró un "plan extravagante" en su contra. “Pretenden montar un show deplorable, a fin de perturbar los efectos positivos de tan importante cita regional", subraya el comunicado emitido por la administración de Maduro.
"Así buscan contribuir a la campaña de descrédito -ya fracasada- que se ha emprendido contra nuestro país desde el Imperio Norteamericano", añade. Por ese motivo, el jefe de Estado tomó “la decisión responsable” de enviar al canciller, Yván Gil, “como jefe de delegación con las instrucciones de llevar la voz del pueblo de Venezuela”.
“Como Estado fundador (de la Celac), Venezuela desea cuidar el éxito de este principal mecanismo de unión e integración regional a favor de nuestros pueblos”, prosigue el escrito, mientras que agradece al presidente argentino Alberto Fernández por la invitación.
“Hemos sido informados de manera irrebatible de un plan elaborado en el seno de la derecha neofascista, cuyo objetivo es llevar a cabo una serie de agresiones en contra de nuestra delegación encabezada por el presidente”, advirtió el gobierno venezolano.
Horas antes, la reunión prevista para este lunes entre el presidente Luiz Inácio Lula da Silva y el venezolano en Buenos Aires había sido retirada de la agenda del Jefe de Estado brasileño. Si bien no fue informado el motivo, fuentes del Ejecutivo y la Cancillería de Brasil dijeron que el encuentro fue cancelado a pedido de Maduro.
Las fuentes afirmaron que la única información que tenían es que Maduro habría cancelado su ida a Argentina, donde este martes se celebra la séptima cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños. En una entrevista al diario brasileño Folha de S. Paulo, el Alberto Fernández afirmó que "Venezuela es parte de la Celac, y Maduro está más que invitado. Hasta donde sé, vendrá".
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El encuentro entre Maduro y Lula, quien regresó al poder el 1 de enero para un tercer mandato, generaba expectativas luego del distanciamiento entre Caracas y Brasilia durante el mandato del ultraderechista Jair Bolsonaro.
La semana pasada una comisión diplomática brasileña llegó a Venezuela para "normalizar las relaciones entre ambos países", informaron fuentes del gobierno de Brasilia, y trabajar en la reapertura de sus sedes consulares, cerradas desde 2020.
