La tensión entre el Gobierno de Córdoba y los sindicatos estatales sumó este lunes un nuevo episodio en la ciudad capital, en el marco de las medidas anunciadas por la Provincia para incrementar descuentos y aportes destinados a cubrir el déficit de la Caja de Jubilaciones. En ese contexto, organizaciones gremiales realizaron una movilización por el centro cordobés que complicó seriamente el tránsito y culminó con un acto frente al Centro Cívico del Bicentenario.

La protesta estuvo encabezada por distintos gremios del sector público y tuvo como uno de sus principales oradores al secretario general del Sindicato Unión Obreros y Empleados Municipales (Suoem), Rubén Daniele, quien apuntó con dureza contra el gobernador Martín Llaryora y cuestionó las reformas impulsadas por el Ejecutivo provincial.
Durante su discurso, Daniele acusó al mandatario de priorizar su proyección política por encima de la situación de los trabajadores estatales. “Lo único que tiene en la cabeza es su reelección en 2027”, afirmó, y sostuvo que el Gobierno busca avanzar sobre quienes “pusieron el pecho” durante la pandemia y en años anteriores.
El dirigente gremial elevó aún más el tono al lanzar amenazas verbales directas contra el gobernador, al asegurar que los sindicatos lo irán a buscar “donde esté”, incluso “debajo de la cama”, en rechazo a las modificaciones en el sistema previsional. Las expresiones generaron un fuerte impacto político y reavivaron el debate sobre los límites del discurso sindical.
Las declaraciones se produjeron pese a antecedentes judiciales previos del titular del Suoem, ya que en otra oportunidad manifestaciones de tono similar derivaron en una condena que lo obligó a realizar trabajos comunitarios. Aun así, Daniele reiteró sus críticas y volvió a cargar contra Llaryora, a quien acusó de intentar “llevarse puesto” a los trabajadores estatales.
El endurecimiento del discurso gremial se da en un escenario de creciente conflictividad entre la Provincia y los sindicatos, que rechazan los cambios en el esquema previsional y anticipan la continuidad de medidas de fuerza si no hay modificaciones en la propuesta oficial. Mientras tanto, el conflicto amenaza con profundizarse y mantener en tensión la relación entre el Gobierno cordobés y el sector estatal.