Fuerte desaceleración de los precios mayoristas en marzo: ¿Es el anticipo de la baja de la inflación?

El Índice de Precios Internos al por Mayor registró una fuerte desaceleración en el ritmo de aumentos durante el mes de marzo. Según informó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), fue del 5,4%, más de cinco puntos porcentuales por debajo del Índice de Precios al Consumidor, que llegó al 11%. Se trata del tercer mes consecutivo de descenso, lo que podría consolidar la tendencia que también muestra el IPC general.

Comparando mes a mes, la desaceleración en marzo fue del 50%, considerando que dicha variable, en febrero, había registrado un alza del 10,2%. Además, es un 90% menor que el techo que se alcanzó en diciembre de 2023, cuando el número experimentó un impresionante incremento y alcanzó el 54%. Luego, comenzó la inclinación a la baja, disminuyendo al 18% en enero y consolidándose en el último bimestre.

Según explicó el reciente informe del INDEC, la variación del último mes es consecuencia de la suba de 6,2% en los “Productos Nacionales”, compensado parcialmente por la deflación del 1,7% en los “Productos Importados”. Además, el Índice de Precios Internos Básicos al por Mayor (IPIB) presentó un aumento del 4,9% en el mismo período, mientras que el Índice de Precios Básicos del Productor (IPP) registró un alza del 5,0%.

En el primer trimestre del año, el IPIM acumula un alza del 37% frente a una inflación del 51,6%, lo cuál, considerando la desaceleración en el ritmo de aumento de precios que se está observando simultáneamente a nivel minorista, se desprende que, si se mantienen las variables, podría seguir la misma tendencia; mas allá de que, vale aclarar, ambos parámetros miden cuestiones distintas y que no necesariamente la baja de una simboliza, necesariamente, la de la otra.

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¿El retroceso de los precios mayoristas simboliza una disminución de la inflación?

Sin embargo, eso es lo que cree el presidente Javier Milei, quién, tras conocerse los datos correspondiente al tercer mes del año, aseguró que el gobierno de La Libertad Avanza está "derrotando" a la tasa de inflación. "Falta muchísimo pero es cierto que hemos hecho un montón", agregó en su posteo, publicado en X (es Twitter).

Según el Director de EPyCA Consultores, Martín Kalos, pese a que "no todos los niveles de aumentos en el ámbito mayorista se trasladan necesariamente y de la misma manera a los minoristas", ya que algunos aspectos, como el costo de las tarifas, se miden de una manera para el efecto en empresas y de otra para hogares, "hay cuestiones que te van indicando cómo va a trasladarse en parte a los precios minoristas".

Y aunque afirmó que nos encontramos en un entorno donde el IPC apunta a cifras ligeramente menores a las actuales, "hay varios componentes que atentan contra que la inflación siga bajando tan rápidamente, como lo ha hecho desde diciembre".

"El descenso fue importante, pero seguimos en niveles elevados, porque estamos hablando de números que giran en torno al 10%. Y el piso para los próximos meses está alto. Esto pasa, entre otros, porque tenemos un impacto de tres puntos mensuales por las tarifas energéticas", sostuvo, en diálogo con PERFIL.

A su vez, dijo que "estará por verse qué pasa con la cuestión cambiaria", ya que "el tipo de cambio oficial viene devaluándose a una tasa del 2% pero eso no va a continuar eternamente". "En algún momento el tipo de cambio tendrá que subir unos puntos más y eso te pone un piso a la inflación. O la liberación del cepo cambiario obligará al Gobierno a también ajustar el precio del dólar a la nueva demanda que vaya al dólar oficial al eliminar las restricciones", aseveró.

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En línea, remarcó: "Todos esos escenarios no los conocemos, porque todavía no sabemos cuál es la estrategia para la unificación cambiaria que va a implementar Milei; ni el timing, ni las medidas, ni el objetivo, que ha cambiado a lo largo del tiempo. Cuando eso sea claro sabremos cómo será su impacto en los precios al consumidor, pero mientras tanto juega la especulación".

Respecto a la pérdida de poder adquisitivo de los ingresos, producto de la "licuadora", parte del ortodoxo "plan de shock" de la gestión libertaria, lo que ha llevado a una profunda caída del consumo, de la demanda, y alterado el nivel de precios en varios aspectos, aseguró que, en el corto plazo, se va a encontrar una "estabilidad" y "van a dejar de perder tanto como lo vienen haciendo, como ocurre, sobre todo, con el empleo registrado".

En base al contexto general, concluyó: "Todas estas variables le marcan un piso alto de la inflación, más alto del que nos gustaría, de entre el 7% y el 10%. Y va a costar mucho que baje de esos niveles. Este es el marco en el que el Gobierno va a tener que montar una estrategia para continuar desinflando a la par que sigue normalizando los otros aspectos de la economía como el régimen cambiario".

Similar fue la postura de la economista Natalia Motyl, Directora de la Fundación Libertad Humana y docente de UCEMA (Universidad del Centro de Estudios Macroeconómicos de Argentina), quién afirmó que "el ajuste de precios relativos, la corrección del tipo de cambio que hoy es inevitable y lo que suceda en el frente externo puede presionar al alza el índice".

"En ese caso, será un año de muchísima volatilidad. La inflación va a bajar pero lo hará en 2025 por la política monetaria restrictiva. Todavía hay que sincerar muchos precios para que veamos al índice mensual presentar una desaceleración notable", indicó.

RS/LR