Para intentar develar la duda, Perfil contactó a 35 líderes de opinión, economistas, empresarios, ejecutivos y consultores. Les preguntó, ofreciendo la reserva de su identidad para que opinaran con libertad, acerca de la extensión de la crisis y su impacto local. También les pidió opiniones sobre alternativas de inversión.
A pesar de la euforia de los mercados el viernes, la mayoría de los consultados señaló que la alta volatilidad en los mercados internacionales continuará, por lo menos, hasta mediados del año próximo.
Y, por el lado de la economía real, creen que la desaceleración del crecimiento mundial se extenderá aún más. “Recién a partir de 2010 se puede pensar en una recuperación sólida”, parece ser un diagnóstico mayoritario.
El 56% de los encuestados consideró que compraría dólares en caso de disponer de unos ahorros. A la hora de justificar tal recomendación, apuntaron a razones de tranquilidad psicológica del pequeño ahorrista que desconoce el funcionamiento de los mercados y no a los eventuales retornos de la colocación. “Si no quiere pensar más, compre dólares”, aconsejaron.
El 46% de los participantes, la primera minoría, predijo que el dólar terminará el año a una cotización nominal de entre $ 3,20 y 3,25 pesos.