La liberación del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva generó un fuerte impacto político en Brasil que ya arroja las primeras consecuencias. Según una encuesta de Atlas Political Research, la imagen positiva de Lula tuvo un importante crecimiento en estos días, al mismo tiempo hubo una caída en la imagen positiva del actual presidente Jair Bolsonaro.
El estudio muestra que aquellos que desaprueban la detención del ex presidente aumentaron del 37.4% al 44.4, una suba de 7 puntos porcentuales. Lo mismo que creció la imagen positiva del ex mandatario (40,7% contra 34%)
La encuesta fue realizada vía Internet entre el 10 y el 11 de noviembre, dos días después de su liberación, con 2.000 personas de todas las regiones de Brasil. Atlas Political Research compara este nuevo estudio con su encuesta de julio.
A pesar de esta mejoría para Lula, aún el 53,5% de la población tiene una imagen negativa del líder del Partido de los Trabajadores (PT) y no lo votaría en una elección.
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En ese sentido, el 56.5%, rechaza el fallo de la Corte Suprema de Brasil que el jueves pasado revocó la ejecución de la sentencia y dejó en libertad a Lula al día siguiente, aunque también benefició a otros presos de la Operación Lava Jato. Solo el 29.4% estaba a favor a la decisión del máximo tribunal de justicia brasilero.
En diálogo con El País de Brasil, el politólogo Andrei Roman, fundador de Atlas, explicó estas posturas contradictorias. "Muchos votantes de Lula esperarían que la Corte Suprema decidiera sobre su inocencia, en lugar de adoptar esta solución, que esencialmente retiene al petista como rehén en el futuro, y lo convierte en un chivo expiatorio para él. Además, también está la liberación de otros personajes, muchos de ellos bastante controvertidos".
Por otro lado, la consultora también detalla que en un enfrentamiento entre el candidato del PT que apoye Lula, ya que aunque está en libertad todavía está condenado en segunda instancia y por lo tanto no puede presentarse a ningún cargo, contra Bolsonaro o el propio ministro de Justicia, Sergio Moro, perdería las elecciones. El candidato de Lula perdería 45.6% a 41.3% contra el actual presidente y 47.6% a 40.2% contra el ex juez que impulsó el Lava Jato.
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De todas maneras, la popularidad del gobierno de Bolsonaro viene en caída, pero se mantienen dentro del margen. La tasa de votantes que piensan que la administración es mala o terrible ha aumentado del 39.8% al 42.1%, mientras que la tasa de quienes creen que el Ejecutivo es muy bueno o bueno cayó del 28.2% al 27.4%. Los que opinan que el desempeño de la derecha es regular pasó del 28.7% al 29.6% de los encuestados.
Asimismo, la imagen de Moro y Bolsonaro sigue siendo ligeramente mejor que la de Lula. el 40.7% de los encuestados ve al petista positivamente, mientras que el 53% lo ve negativamente. Con Bolsonaro, las tasas son 42.6% (positivo) y 51.6% (negativo). Los mejores números son para el ex juez del Lava Jato: 48.4% (positivo) y 45.6% (negativo).
Sin embargo, Atlas señala que esta es la primera vez que la aprobación personal del ministro de Justicia ha sido inferior al 50%. Ya había perdido 10 puntos de apoyo, del 60% al 50,4%, poco después de la serie de informes Lava Jato de The Intercept Brazil.
ED/MC
