Ramallah - Un nuevo acuerdo de cese de fuego entre representantes de los movimientos rivales Hamas y Al Fatah, similar al que se produjera el fin de semana y que no lograra detener los cruentos enfrentamientos entre uno y otro bando, entró en vigencia este martes después de registrarse nuevos combates en la zona de Gaza, que dejaron un saldo de 6 muertos y más de 20 heridos.
Las escenas más dramáticas se vivieron cuando, en su salida de la escuela, siete niños fueron heridos al encontrarse de repente en medio del fuego cruzado de los milicianos. Por otra parte, partidarios de Hamas secuestraron a 5 activistas de Al Fatah en el campo de refugiados de Jabaila, con lo que ya son más de 20 los cautivos en poder de ambos bandos.
El nuevo pacto de no agresión, que entró en vigencia a las 23 fue anunciado ante la prensa por el presidente palestino, Mahmud Abbas (de Al Fatah), quien había llamado a los representantes de uno y otro partido a detener las confrontaciones violentas.
Para que ello se plasmara, no obstante, fue necesario recurrir a mediación de Egipto, en cuya embajada se reunieron para arribar al armisticio el ministro del Interior palestino, Said Siam, de Hamas (mismo movimiento islamista que el premier Ismail Haniya), con autoridades de las fuerzas policiales y de seguridad cercanas a Al Fatah.
En la reunión se acordó la liberación de los secuestrados por ambos bandos, así como el fin de toda confrontación armada. El ministro del Interior aclaró que tanto el primer ministro como el presidente dieron su aprobación al arreglo.
Poco antes del acuerdo para el cese el fuego, el primer ministro Haniya, quien confirmó el pacto, dirigió un mensaje a la nación en el que llamó a todas las organizaciones palestinas a cesar los enfrentamientos armados, aunque reiteró que la convocatoria anticipada a elecciones anunciada el sábado por Abbas es "inconstitucional" y pone al país en "riesgo de retroceder diez años".
"Rechazamos esta convocatoria, no la aceptamos, e insistimos sobre la necesidad de respetar las elecciones del pueblo palestino", sostuvo el líder de Hamas, quien calificó a la convocatoria de "bomba política" y reivindicó la pretensión de su movimiento de pder constituir un gobierno de unidad nacional. Según él, si ello no se logró aún "se debe a una decisión secreta de derrocar al gobierno, una decisión inspirada por Estados Unidos".
Haniyeh acusó además al presidente Abbas de haber contribuido al aislamiento económico al que fue sometido el gobierno de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) por parte de la Unión Europea y Estados Unidos, luego de que Hamas ganara las elecciones de enero y formara gobierno en marzo.
"Nos encontramos ante un aislamiento económico y financiero y también ante intentos de aislarnos políticamente, y nos hicimos cargo de un gobierno sin dinero y sin un control sobre los medios", sostuvo.
En esas circunstancias, de acuerdo con el premier palestino Israel "tuvo carta blanca para realizar asesinatos y destrucciones en los Territorios y provocar un estado de anarquía en el campo de la seguridad".
Haniyeh dijo finalmente que Hamas, que no reconoce el Estado de Israel, está dispuesto a llegar a una tregua de 10 a 20 años con el gobierno israelí si se retira de todos los territorios ocupados en 1967 y permite la constitución de un estado palestino en Cisjordania y la Franja de Gaza.
Abbas también había exhortado a los grupos palestinos a cesar los enfrentamientos en un comunicado difundido hoy en Ramallah. "En nombre de la unidad nacional, pido a todos, sin excepción, respetar el cese el fuego", dijo el mandatario, quien se reunió el lunes con el primer ministro británico, Tony Blair, y ratificó el llamado a elecciones anticipadas tras sellar un acuerdo con el consejo ejecutivo de la Organización para la Liberación Palestina (OLP), pese a la oposición de Hamas.
Fuentes: DPA y Télam