El oficialismo lanza un nuevo repechaje por la Ley de Envases
En medio de un Congreso con escasa actividad y que tomó protagonismo ayer por la visita del jefe de Gabinete, Agustín Rossi, el oficialismo presentó por tercera vez la Ley de Envases.
Ley de envases |
Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE)
Según informó el periodista Claudio Mardones en Modo Fontevecchia, por Net TV y Radio Perfil (FM 101.9), Agustín Rossi visitó el Congreso, se trata de su tercera visita, y la segunda a la Cámara de Diputados, en cumplimiento del artículo 101 de la Constitución Nacional, para brindar informes periódicos sobre la gestión del gobierno al parlamento.
Hubo una exposición de seis horas donde el ministro defendió al gobierno y reiteró su discurso esperanzador, sostuvo que tiene una mirada positiva y que cree que la Argentina saldrá de esta situación dentro de poco. Volvió a insistir con respecto a las posibilidades de un cambio drástico el próximo año en términos de la balanza comercial, y especialmente en materia energética.
Negó que existan posibilidades de una devaluación brusca pero apuntó duramente contra Juntos por el Cambio y tuvo una polémica con el socialismo santafesino.
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La visita de Rossi a la Cámara Baja fue la previa de un acto que se concretó hoy, allí mismo, que tiene una relevancia política particular y que posiblemente sea parte de la conversación pública en las próximas semanas.
El evento fue protagonizado por la diputada Natalia Zaracho, la primera trabajadora cartonera en ser elegida como diputada nacional, a su lado estuvo el viceministro de medio ambiente, Sergio Federovisky, junto al titular de la bancada oficialista, Germán Martínez, quienes están presentando por tercera vez la ley de envases.
En un momento donde buena parte del oficialismo está inmerso en el escenario electoral y las definiciones, los diputados de los movimientos sociales vuelven a presentar este proyecto, que busca ordenar el reciclado de los envases de plástico. Es una pulseada muy importante.
En los intentos anteriores, hubo un lobby claramente focalizado, en un caso, en la Cámara de Comercio de los Estados Unidos en Argentina, que ha enfocado muchísimo su presión para evitar que este proyecto prospere, y lo mismo sucede con empresas de gaseosas, pero especialmente con la multinacional de Coca-Cola. No es un tema ajeno a la Cámara de Diputados las presiones de estas empresas para evitar que este proyecto avance.
Entre otros puntos, busca poder contar con un mecanismo para formalizar el trabajo de 150 mil trabajadores del reciclado en todo el país, en un escenario donde se producen 50 mil toneladas diarias de residuos. En ese contexto se recupera el 20% de esas toneladas de residuos, pero solamente el 9% va al reciclado.
Este proyecto lo que plantea también es crear una tasa especial de responsabilidad del productor, que establece un techo que debe ser menor o igual al 3% sobre el valor del envase, y esto apunta a las empresas que no tengan mecanismos propios de reciclado.
Este elemento ha sido materia de durísimas presiones durante el año pasado, que se concrete una nueva presentación es una demostración de fuerza para el oficialismo, no solamente porque la presentación del proyecto está protagonizada por Germán Martínez, el titular de la bancada, sino porque también está Daniela Vilar, ministra de Ambiente de la Provincia de Buenos Aires, los representantes de todas las organizaciones sociales y los espacios políticos que forman parte del Frente de Todos, y la expectativa de que este debate se transforme en un termómetro para la política en este momento donde la atención está puesta en el cierre de listas.
El debate ambiental promete ser también un espejo incómodo para el oficialismo, especialmente para quienes no acompañan esta iniciativa, en un momento donde la conversación pública podría trepar a un señalamiento muy duro contra las empresas que están jugando para impedirlo.
