El diputado nacional, Julio Cobos, se refirió a las internas dentro del espacio y remarcó el valor de la UCR en la lucha por la presidencia. "Más allá de acompañar las fórmulas del PRO, el radicalismo debe tener algún referente a nivel nacional". Además, subrayó las pocas opciones electorales del oficialismo, en Modo Fontevecchia, por Net TV y Radio Perfil (FM 101.9).
¿A pesar de todos los intentos, se terminó rompiendo Cambia Mendoza tras la decisión de De Marchi de ir por la gobernación?
Hubo muchos intentos de diálogos. Cambia Mendoza fue concebido en 2015 con una expresión de unidad muy fuerte, incluso mucho más fuerte que Juntos por el Cambio a nivel nacional. Cuando fui candidato a diputado, la Coalición Cívica fue aparte de Cambia Mendoza.
Nos costó retener algunos aliados, aunque el PRO es fundamental en nuestro espacio. Sobre todo porque repercute mucho a nivel nacional.
De Marchi era una figura que estaba encolumnada con Horacio Rodríguez Larreta e hizo muchas gestiones para ver si podía mediar en este enfrentamiento político. Fundamentalmente basado en dos liderazgos muy fuertes como el suyo y el de Alfredo Cornejo, dos personas relativamente jóvenes pero con una gran trayectoria en política.
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Acá en Mendoza teníamos la posibilidad de competir, ya que tenemos las primarias abiertas, hay boleta única y no hay reelección, lo cual me parece bien.
Lo cierto es que esta provincia cuyana y sus leyes tienen esas características, diferentes a Córdoba, por ejemplo, en donde no hay primaria, y han tenido que hacer un gran esfuerzo para convivir Luis Juez y Rodrigo de Loredo. Si hay dos liderazgos fuertes en un espacio cuesta convivir.
En medio de presiones del espacio desde las autoridades nacionales, De Marchi eligió el camino a competir como candidato a gobernador. Entiendo que el espacio tendrá que ver con su antiguo amor, el partido demócrata, del cual se fue para fundar el PRO acá.
¿Qué posibilidades concretas de triunfo tiene De Marchi?
Las encuestas ubican a Omar De Marchi en tercer lugar. A lo mejor puede lograr atraer los votos de un peronismo deshilachado en Mendoza. Supongo que hizo ese análisis. Y quizá apostando a tener más tiempo para crecer, porque si perdés unas primarias, te corta.
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Entiendo que es una aspiración personal de él, habría que preguntarle por qué tomó esa decisión.
Muchos analistas decían que en el Frente de Todos hay pocos candidatos porque saben que van a perder y que en JxC hay muchos porque saben que ganarán. ¿Justamente las posibilidades de triunfo posibilitan que haya más divisiones? ¿Además, esto es un anticipo de las tensiones que se verán en Juntos por el Cambio, tanto en la etapa electoral como si le toca gobernar?
Obviamente el peronismo está muy alicaído. Más allá de Alfredo Cornejo, que tiene muchas posibilidades de suceder a Rodolfo Suarez, cualquiera de nuestros candidatos tenían muchas posibilidades de ganar. Eso despierta la ambición de participar.
Pero hay formas y formas, y en eso es que uno busca la mejor alternativa para su persona. Por eso, a veces, lo personal pesa más que la construcción colectiva, como sucede en nuestro espacio, el cual ya se está organizando nacionalmente con la renuncia de Mauricio Macri.
En el PRO resta definir, a nivel nacional, si Vidal será candidata. Y en el radicalismo hay dos precandidatos, entre ellos y más lanzado oficialmente, el gobernador jujeño Gerardo Morales.
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Alfredo Cornejo y su iniciativa de ir por la gobernación mendocina
Se hablaba mucho de Alfredo Cornejo como vicepresidente de Bullrich, lo cual tenía lógica desde la búsqueda de una fórmula mixta, con una mujer y un hombre e, incluso, con una visión porteña y del Interior. ¿Qué pasó que, finalmente, se decidió por la gobernación provincial?
Muchos especulan con que el tema de De Marchi lo hizo bajar a la provincia para asegurarse el triunfo, pero no creo en eso. Sostengo que el radicalismo tiene una estructura muy fuerte, con buenos candidatos con potencialidades jóvenes, como el intendente de la ciudad de Mendoza.
¿Tal vez sea porque a lo mejor hubiera perdido ante De Marchi?
No, no creo, fue una decisión propia del Cornejo: preferir ser el número 1 en una provincia y no el 2 a nivel nacional. Él tiene una buena relación con Patricia, hubiera sido una buena fórmula, pero siempre tuvo una pata puesta en la provincia como para volver. Por el lado de la exministra de Seguridad, supongo que seguirá buscando a referentes del radicalismo, como también Larreta. Y esto es sano, para poder ensamblar una buena y respetuosa coalición de gobierno.
Claudio Mardones (CM): El intendente de Luján de Cuyo, Sebastián Bragagnolo, es un hombre de De Marchi, ¿cree que esta movida puede poner en riesgo que controlen ese municipio? ¿Qué le preguntaron a usted cuando lo vieron con De Marchi?
Fui, como el año pasado, a la exposición del intendente, es que soy vecino de Luján. Y tengo excelente relación con Sebastián Bragagnolo, ha sido un gran funcionario. Y De Marchi estaba sentado al lado mío, estando en Cambia Mendoza en ese momento, Soy el que más puentes tendí para ver si había una posibilidad de retención.
Con De Marchi conducimos la Cámara, pertenecemos al mismo espacio, tenemos un diálogo muy fluido, hasta me ha pedido consejos sobre la decisión. Pero tengo relación hasta con el propio kirchnerismo de Mendoza. Hemos sacado leyes juntos, como la Ley de Etiquetado con Anabel Ferrnández Sagasti. Acá hay una cierta convivencia que cuesta entender a nivel nacional.
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Al respecto de cómo va a impactar, el resultado electoral no va a ser lo mismo, tanto en Cambia Mendoza como en Luján, pero el intendente tiene una gran aceptación en su municipio y no creo que ponga en riesgo, por más que con el radicalismo llevemos nuestros propios candidatos. Su imagen está muy arraigada a la de un muy buen intendente.
Las tensiones de Juntos por el Cambio a nivel nacional
Alejandro Gomel (AG): ¿A nivel nacional, lo que se viene son unas PASO con Larreta, Bullrich y dos candidatos a vicepresidente del radicalismo, es decir, las fórmulas mixtas?
Yo le sumaría la participación de Gerardo Morales, lo veo convencido de que el radicalismo debe tener referentes nacionales. Después veremos cómo se aprueban, institucionalmente, las alianzas y las autorizaciones que corresponden.
Y no quiero menospreciar el liderazgo y las posibilidades de participación de Facundo Manes. Pero lo más conveniente es que el radicalismo llevara uno solo, más si tenemos dos candidatos a vice con el PRO.
El PRO, la primera vez, fue una fórmula pura, después Macri lo intentó con Miguel Ángel Pichetto. Siempre le reconocen al radicalismo el poder territorial que tiene, es como el peronismo en ese sentido.
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Nuria Am (NA): Teniendo en cuenta que conoce mucho a Cristina Kirchner, ¿cree que el candidato del Frente de Todos va a ser producto de una interna o va a ser elegido a dedo? ¿Y quién podría ser para usted?
Alberto Fernández debería correrse para permitirle a Massa o a alguno de su equipo. Sino tendría que pedir la renuncia ya que no podrían participar un Presidente y su ministro. Hoy no tienen muchas figuras con peso propio, Cristina tendría que haber comenzado a ceder ciertos liderazgos. Poseen varios gobernadores con potencialidad, aunque sean jóvenes.
El interrogante que va a tener la ciudadanía es si un nuevo elegido por la vicepresidente tendrá el mismo resultado que la última gestión. De todas maneras, lo veo entre Alberto Fernández y Sergio Massa.
AO JL
