La derrota del peronismo en Santa Fe desata inquietud en el equipo de Sergio Massa, quien busca fortalecer su campaña y asegurar el piso electoral, según informó Alejandro Gomel en Modo Fontevecchia, por Net TV y Radio Perfil (FM 101.9).
En el búnker de campaña de Massa la derrota del peronismo en Santa Fe ha generado gran preocupación. El antiguo refrán "cuando veas a tu vecino las barbas pelar pon las tuyas a remojar" parece resonar en el equipo del ministro de Economía, ya que el resultado santafesino ha encendido todas las alarmas.
El peronismo no pudo llegar ni siquiera al 30% en Santa Fe y en el oficialismo siguen hablando de aquello que habló Cristina Kirchner: una elección de tercios. Hay un escenario de tercios donde hay que meterse en el balotaje y asegurar el piso electoral, rever la campaña.
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La reacción inmediata ante el revés en Santa Fe se manifestó ayer en Ezeiza, donde se endureció la campaña con la presencia de la principal dirigente del espacio, es decir, sacar a la cancha a la vicepresidenta Cristina Kirchner, quien se unió a Sergio Massa. Sin embargo, todas las miradas se dirigieron hacia el ganador del domingo, Horacio Rodríguez Larreta.
Massa aseguró escuchar al jefe de Gobierno porteño comparando precios de manera exagerada y salió a negar sus palabras, es decir, directamente salió a confrontar a Larreta. Estos fueron los primeros reflejos frente al duro golpe que significó el resultado en Santa Fe para el oficialismo.
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Una preocupación adicional es el ausentismo, ya que en el oficialismo no tienen dudas de que cuando hay una baja participación electoral, esto impacta directamente en ellos. Aquellos que se movilizan para votar suelen estar enojados y tienden a votar en contra del oficialismo.
Por otro lado, quienes deciden no votar generalmente carecen de interés político y, por lo tanto, es improbable que voten por el oficialismo. Es un doble problema para Sergio Massa enfrentar lo que es la baja participación y que esa gente vaya, vote y además lo elija a él.
Por eso, van a volver fuerte las recorridas de cercanía: ir a golpear la puerta, charlar con los vecinos, ir barrio por barrio y tratar de tener una campaña de cercanía para convencer, justamente, a los votantes.
Allí está trabajando también Wado de Pedro para movilizar a la militancia kirchnerista para que haga el trabajo de ir a buscar los votos, que ya lo sufrió el oficialismo hace dos años, cuando perdió las elecciones, y la explicación encontrada para esa derrota fue el ausentismo, es decir, los que votaron en el 2019 y no en el 2021.
Fue un golpe inesperado el de Santa Fe, aunque se pensaba que podían perder pero no de esa manera. Marcelo Lewandowski, quien sacó más puntos en el oficialismo, quedó tercero, debajo de la oposición.
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Hay clima de rever los números. Es difícil confiar en las encuestas, a todos los políticos les gusta mirar esos números pero es difícil confiar teniendo en cuenta la manera extraña en la que está funcionando el electorado.
En medio de este panorama, Sergio Massa sigue adelante con su estrategia de desempeñar una doble función: la de ministro y la de candidato. Su objetivo es alcanzar el piso, tal como mencionó Cristina Kirchner, aunque no está garantizado. Luego, buscará avanzar hacia las elecciones de octubre y poder meterse en el balotaje.
VF JL