El dirigente social Luis D´Elía comparó la situación económica nacional con la regional. "En Uruguay no hay inflación y tienen moneda dura, pero están liquidados en consumo popular", aseguró en Modo Fontevecchia, por Net TV y Radio Perfil (FM 101.9).
¿Por qué piensa que Alberto Fernández y Victoria Tolosa Paz son la mejor fórmula del Frente de Todos?
Es que tuvimos un gobierno exitoso en uno de los peores momentos de la historia, con una pandemia con tantas muertes. Si pudimos salir exitosamente de eso, hay que pensar en la reelección de Alberto y Axel Kicillof. Eso implica el sentido común.
Además, se ordenó la situación financiera, se pagó los sueldos de todas las empresas privadas del país durante año y medio. Tuvimos inflación, pero paritarias permanentes como política compensatoria. No tuvimos ni una sola denuncia de corrupción.
El Presidente hizo cosas muy importantes y articuladas con el pensamiento más profundo del kirchnerismo. El error político más grave de Cristina fue cambiar el kirchnerismo por la Cámpora.
¿Esa pérdida de la capacidad de consumo a causa de una grave inflación, tiene que ver sólo con la pandemia y la guerra entre Ucrania y Rusia?
Lo invito a ver la vereda del frente: en Uruguay no hay inflación y tienen moneda dura, pero están liquidados en consumo popular. Yo estuve hace unos días ahí y van todos a comprar medicamentos y alimentos a la costa entreriana. Hubo protestas de un millón de uruguayos en contra de las políticas económicas, pero esto no lo resaltan los medios de acá.
Usted dice que poder sostener un política que genere una demanda agregada para que el PBI y el consumo sea más alto que en los países vecinos, sumado a que hubo que destinar fondos para la pandemia y la inflación derivada por la guerra, explica la mayor inflación. ¿O sea que, a su juicio, es mejor esto siempre y cuando se mantenga un crecimiento alto?
Acá no hay que defender el valor de la moneda sino el consumo popular, que está en un gran momento.
Cuando estalló el país en 2001 no había protección social. Hoy tenemos 6% de desocupación y 22 millones de protegidos, de los cuales la mitad reciben ayuda estatal. El mundo vive circunstancias muy particulares, con diversas crisis. Le cuento algo personal, tengo una hija que vive en Estonia, es antropóloga, y está expuesta hasta a un ensayo nuclear en esa zona.
¿Cuáles son las diferencias entre Cristina y Néstor?
Cristina arrasó al kirchnerismo para poner a la Cámpora. Nadie está de acuerdo con la hegemonía de la Cámpora.
Jorge Asís dice que el peor error de Néstor Kirchner fue no haberse presentado él a la reelección en lugar de Cristina, ¿coincide?
A la hora de conducir el Estado, los dos tenían una mancomunión muy fuerte. A la hora de conducir la fuerza política, se extraña a Néstor, era abierto a todos los sectores. Cristina, en cambio, habla con un pequeño séquito de la Cámpora. Él tenía la enorme capacidad de volver sobre sus pasos y escuchar a sus compañeros.
El poder de La Cámpora
¿Si él no hubiese muerto, la Cámpora habría cobrado la importancia que usted menciona?
No, seguro que no. Yo lo hablé con él en su momento y la imaginaba con el 20% del poder. La Cámpora está conformada por pibes de muy poca experiencia. Máximo Kirchner es una mezcla de Myriam Bregman y Eduardo Duhalde. De este último se parece en la forma de pelear cargos y de construir el aparato, y de Bregman se parece a la hora de poner consignas políticas. El default, por ejemplo, es una consigna oxidada.
Si hay alguien que arregló, negoció y le pagó todo al Fondo fue Néstor Kichner.
"El hijo de" pesa mucho. Por ejemplo Larroque, su mérito es ser amigo de Máximo Kirchner. Cuando fui diputado de Buenos Aires, me sentaba al lado de Ricardo Alfonsín, y en el radicalismo era uno más, no significaba absolutamente nada ser “el hijo de”.
Tres acusaciones de Cristina contra Alberto
¿Siente que cambió mucho su imagen del comienzo del kirchnerismo, cuando se lo caracterizaba como alguien extremo y radicalizado, a la que tiene ahora, con mucha más mesura?
Le contesto con el corazón. Tengo un hijo de 30 años, que se llama Luis Ignacio porque me pasé la vida mirando a Lula. Y ni él es el mismo que hace 30 años. El planeta y el país tampoco son iguales, estamos al borde de situaciones terribles. Este Lula que llega lo hace de la mano de Joe Biden, en un pacto con la centroderecha paulista y ofreciéndose como garante para un acuerdo energético entre Venezuela y Estados Unidos.
Ahora bien, la dirigencia argentina debería entender el papel de Lula hoy, y de la región, que es una especie de hipermercado de un mundo en crisis.Yo no cambié, el mundo cambió.
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¿Usted dijo que la no realización de un encuentro entre Lula y Cristina fue, en gran medida, porque cuando él cayó preso, ella ordenó que no se lo visitara para no quedar pegados por el tema de la corrupción?
Sí, efectivamente fue así. La razón del enojo es esa. Alberto desobedeció la orden y visitó a Lula en la cárcel. Por este motivo, cuando vino a la Argentina, el presidente brasileño no se reunió con Cristina.
AO FM
