En la provincia de Buenos Aires ya se aplicaron 3.519.505 dosis de las vacunas para combatir al Covid-19, una cifra que supera los 3.463.255 testeos que se hicieron desde que la pandemia comenzó a ser detectada en el país. Algún desprevenido podrá interpretarlo como una buena noticia, reflejo de la velocidad con la que se viene vacunando. Sin embargo, no es más que otra señal más de una de las principales falencias en política sanitaria contra el coronavirus: la poca cantidad de testeos que se viene realizando.
En apenas cuatro meses desde que se aplicó la primera vacuna en territorio bonaerense ya se logró superar la cantidad de hisopados realizados en 14 meses de pandemia, cuando por la facilidad para comprarlos y el tiempo que se lleva utilizándolos los testeos deberían tener todavía cifras superiores.
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En el promedio de los 35 municipios bonaerenses que conforman el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), todavía los testeos (2.748.614) siguen siendo superiores a las vacunas aplicadas (2.409.720). Sin embargo, ya en la mitad de esos distritos la relación se invierte. Y de no mejorar la campaña de testeos, es inevitable que en una o dos semanas termine sucediendo en todo el AMBA: esta última semana se aplicaron 225.675 dosis, según lo que muestra el portal Sala de Situación que armó el gobierno bonaerense, mientras que los testeos apenas llegaron a 109.675.
Las muestras de laboratorio hechas volvieron a bajar por tercera semana consecutiva en paralelo con los casos confirmados, que también volvieron a tener una caída. Fueron 47.513 contagios nuevos entre el martes 4 y el lunes 10 de mayo, contra los 51.600 que se habían registrado la semana anterior 51.600. Los testeos, en tanto, habían sido 111.256.
Según especialistas, estas curvas casi en paralelo que hacen los contagios y testeos semana a semana en el AMBA son una muestra de que solo se está logrando detectar a aquellos casos que presentan síntomas. En los momentos donde bajan los casos, argumentan, la cantidad de testeos se deberían mantener constantes (saliendo a hacer una búsqueda activa) para dar con casos asintomáticos que puedan estar contagiando a otros sin saberlo.
En la Ciudad, por ahora, los testeos hechos a residentes sigue siendo superior: 1.404.158 son los hisopados que se hicieron desde que comenzó la pandemia, una cifra que escaló con los testeos en el verano a turistas y luego bajó aunque quedó en niveles superiores a los del año pasado. Las vacunas aplicadas, en tanto, superó este lunes las 900 mil (901.536).
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No obstante, siempre y cuando las vacunas sigan llegando, esas cifras también tenderán a nivelarse, aunque con más tiempo transcurrido. La última semana, por ejemplo, se inocularon 104.047 dosis en el ámbito porteño, contra 32.676 hisopados realizados a residentes.
Esta semana, la Ciudad volvió a levantar su promedio de testeos pero igual los casos siguieron bajando (la semana anterior había hecho 27.354 hisopados). En los últimos 7 días se confirmaron 15.692 contagios nuevos, lo que representa una baja respecto a los 16.355 de la semana anterior. Es una señal positiva que los testeos hayan subido y los casos igual hayan seguido a la baja.
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Más presencia en Zona Norte
Así como hace unas semanas los municipios del sur, con epicentro en Ensenada, Berisso y La Plata, eran los más complicados en lo que se refiere a la presencia del virus, ahora el problema parece estar más fuerte en la zona norte y oeste del conurbano bonaerense. El municipio con mayor tasa de incidencia es Pilar, con 596 casos nuevos cada 100 mil habitantes. Sin embargo, fue también por lejos el distrito que mayor cantidad de testeos hizo: 1.914 cada 100 mil habitantes, cuando el promedio de los 35 municipios del AMBA fue de 827.
Segundo en la lista quedó CABA, con 510 casos, y después siguen San Fernando (492) y Escobar (483), ambos también de la zona norte. El top ten lo completan Avellaneda (466), Ituzaingó (464), General Rodríguez (454), Tres de Febrero (445), Ensenada (442) y Hurlingham (433). Excepto Ensenada y General Rodríguez, el resto está como Pilar en el lote de los que más testearon en la última semana.
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Por el lado opuesto, La Matanza volvió a ser el distrito con menos casos semanales confirmados, con 226 cada 100 mil habitantes. Lo siguieron Ezeiza (269), General Las Heras (276), Quilmes (329), Florencio Varela (332), Lomas de Zamora (333), Tigre (334), Vicente López (336), La Plata (338) y Luján (340).
Lomas, Tigre y Vicente López son los únicos de ellos que se destacan por no estar en el lote de los que menos testeos realizaron en la última semana. Vicente López, por ejemplo, es el tercero que más hisopados hizo (1.388 cada 100 mil habitantes). Esos datos tienen su correlato en la tasa de positividad semanal, que fue la más baja de todo el AMBA, con 24%, y junto a San Isidro y San Miguel fueron los únicos que lograron quedar por debajo del 30% (cifra que igual sigue siendo elevada). En el lado opuesto quedó Florencio Varela, con un 83% de positividad semanal.
gz / ds