La operación está en marcha. El Gobierno ya prepara su desembarco en Aeropuertos Argentina 2000 (AA200), la empresa de Eduardo Eurnekian. Así lo afirmó el titular de la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC), Alejandro Granados, durante una reunión que compartió con un grupo de empresarios de su confianza que prestan servicios en diferentes aeropuertos del país.
Granados fue más lejos y deslizó el nombre del probable interventor: Juan de Dios Cincunegui, un joven abogado de la localidad bonaerense de Chivilcoy que forma parte de la escudería de La Cámpora, con probados vínculos empresariales y gustos aristocráticos.
Es el vicepresidente de Aerolíneas Argentinas y, a pedido del viceministro de Economía Axel Kicillof, se hizo cargo a fines de noviembre de la intervención de Intercargo, la firma que se dedica a la atención en tierra de los aviones que llegan al país.
El avance de La Cámpora en el jugoso negocio de los aeropuertos es un hecho. Los alfiles camporistas son Mariano Recalde, presidente de Aerolíneas Argentinas; Guillermo Vitali, presidente del Organismo Regulador del Sistema Nacional de Aeropuertos (Orsna); Manuel Baladrón, subsecretario de Transporte Aerocomercial y ex presidente del Orsana.
El esquema del escuadrón aéreo K se completa con Granados en la ANAC y Cincunegui en sus múltiples roles. Los datos acerca del avance del Gobierno sobre los millonarios ingresos aeroportuarios de Eurnekian, a simple vista, resultan contundentes.
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