Almuerzo patrio por el 25 de Mayo. El jueves al mediodía el precandidato a gobernador bonaerense, Néstor Grindetti, invitó al jefe del bloque del PRO, Cristian Ritondo, a comer a su casa y, junto a los equipos de ambos, sellar un acuerdo para trabajar juntos en la candidatura de Patricia Bullrich a nivel nacional y el despliegue de 135 municipios de la Provincia.
Amigos, hinchas de Independiente y con un preacuerdo de estar juntos en 2023, anticipado por PERFIL en agosto del año pasado, Grindetti y Ritondo eligieron seguir su camino para disputar una PASO contra Diego Santilli. El ágape, distendido, sirvió como foto.
Días antes el jefe del bloque del PRO había estado a solas con la propia Bullrich, quien había elegido al intendente de Lanús sobre él en la disputa por la gobernación. Esa charla, que se dio hace diez días, había sido seca y dura. Ritondo se fue de allí apuntando que la precandidata no había “sido clara” y que le había deslizado que el elegido había sido él. Los días pasaron y en el reencuentro la exministra de Seguridad le expresó que tiene las puertas abiertas para encabezar la boleta a diputados nacionales por la Provincia.
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Bullrich siente que lo necesita para sacar leyes fundamentales, si es que llega a la Casa Rosada, en los primeros dos años. Después, según pudo saber este diario, tendría un lugar en su gabinete si lo desea.
Con ese background, el almuerzo fue distendido. Ritondo pretende que, al menos, treinta dirigentes de su espacio puedan competir y eventualmente ganar. Todos llevarán la boleta de Bullrich-Grindetti arriba. Entre otros, varios de los que formaron parte de la comida: Santiago López Medrano de San Martín y Rita Salaberry de Luján (quien no traicionó al diputado del PRO a diferencia de Noelia Ruiz de Mercedes o Agustina Ciarletta de San Fernando).
Grindetti se comprometió a respetar lugares en las listas, darle espacio en un hipotético gabinete y juntos seguir caminando la Provincia.
El precandidato a gobernador intensificará sus recorridas en estos días: un 80% de su tiempo estará en el Conurbano. Hoy se lo podrá ver, junto a Bullrich, en Merlo con la senadora provincial y precandidata a intendenta, Aldana Ahumada, quien a su vez venía trabajando con Ritondo.
En cuanto al interior Grindetti planea ir a las grandes ciudades, como Mar del Plata, Bahía Blanca (donde el intendente local Héctor Gay se sumó al bullrichismo), San Nicolás, Olavarría y Junín, entre otras. Esto supone también ir a la caza de más intendentes para el bullrichisimo. Ya el exviceministro político del Interior, Sebastián García de Luca, viene cosechando adhesiones, como Manuel Passaglia de San Nicolás.
El jueves por la noche Grindetti estuvo con Julio Garro de La Plata, y la semana que viene tiene previstas reuniones con intendentes del Interior que exploran un acercamiento. Incluso radicales díscolos de la conducción partidaria.
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Paralelamente, el desafío que se trazó el jefe de la campaña bonaerense, el diputado Adrián Urreli es que progresivamente se asocie la imagen del precandidato bonaerense a la de Bullrich. Para ello habrá notas en medios juntos, actos y recorridas.
Mientras tanto, trabaja en los segmentos seguridad, producción y educación para elaborar las propuestas para la Provincia. El precandidato tiene en su mente sumar en eso a Ritondo, pero también a Javier Iguacel, de Capitán Sarmiento, y a Joaquín de la Torre, senador provincial y exintendente de San Miguel.
“El orden que propone Joaquín, una sensible baja de impuestos que impulsa Iguacel, la decidida lucha contra el delito que encarna Cristian sumado a mis propuestas de descentralización hacia los municipios serán los ejes de mi plataforma“, dijo Grindetti.
