Los festejos de este martes por la llegada de la selección argentina al país tras ganar la Copa del Mundo no excluyeron los debates sobre los sentidos sociales del recorrido, del paso o no por la Casa Rosada. Frente a las apuradas acusaciones de “desclasados” a los jugadores por parte de Nicolás Fiorentino en la TV Pública, el filósofo Ricardo Forster celebró que lo había en la calle, incluyendo al equipo de fútbol era unidad.
"El fútbol es una metáfora de cómo vivimos y sentimos los argentinos", sostuvo el doctor en filosofía, docente e investigador de la Universidad de Buenos Aires (UBA). "Es parte de nuestra vida cultural, de nuestros sentimientos y de nuestra memoria. También de la infancia y de los vínculos que hemos construído a lo largo del camino. Y cuando se trata de la selección, eso ya se multiplica, hay un algo que crece y se expande", expresó en diálogo con Radio Nacional.
Para el intelectual los festejos ofrecen “la posibilidad de sentir que el país tiene energía, que tiene capacidad de superarse”. “Vimos rostros alegres que no veíamos hace tiempo en las calles de la Ciudad de Buenos Aires”, agregó.
De todos modos, reconoció que hay un grupo que vio con desagrado lo ocurrido y sostuvo: “Hay gente que tiene a los medios concentrados como núcleo fundamental y a una parte, para nada menor, de la oposición política que se proclaman en contra de cualquier proyecto de ampliación de derechos, de democratización de la vida o que huela a pueblo”.
“Ellos sienten que millones de personas en las calles pueden generar otra cosa, puede ser una energía para ir hacia lo que le hace falta a nuestra sociedad, que es precisamente distribuir el ingreso; le tienen miedo a las multitudes”, evaluó.
Además señaló: “Le tienen miedo o rechazo a las multitudes también por una cuestión estética, para ellos el pueblo en la calle es algo de mal gusto, ven al populacho como un sujeto irracional, puramente afectivo, que no mide sus acciones. Se creen parte de una élite, y esconde muchas veces una cuestión racial".
En cuando a la caracterización sociológica, Forster destacó que esa multitud en las calles representan “algo de carnavalesco”. “La fiesta siempre le pareció, a las clases dominantes, algo oscuro, peligroso y que hay que controlar y, si es posible, impedir, bueno lo intentaron, no sé por qué no se prepararon las cosas como para que se pudiera transitar con el micro toda la avenida 9 de Julio”, cuestionó. “Se ha buscado reducir el recorrido del festejo porque a más recorrido, más barrios, más multitud, más pueblo, bueno evidentemente no tenían muchas ganas de eso”, concluyó.
Los jugadores “desclasados”
En el programa "Desiguales", conducido por Lucila Trujillo en la TV Pública, el periodista Nicolás Fiorentino tildó al plantel de jugadores de “desclasados”.
“Hoy escuché muchas personas que no tienen nada que ver con el Frente de Todos (FdT) decir públicamente: ‘Che, a mí no me parecía mal que vayan, es la Casa de Gobierno, el Gobierno es de todos’”, introdujo Trujillo. “Acá el análisis es otro: son jugadores a los que nosotros les pedimos que compitan a la más alta élite, en los clubes más importantes del mundo, y terminan siendo lo que yo dije antes. Perdón por lo que voy a decir, tal vez es el momento más incómodo, porque en este momento son ídolos nacionales y populares, pero la gran mayoría de los futbolistas profesionales son unos desclasados”, analizó Fiorentino.
Ante esto el periodista Jonatan Viale de La Nación+ twitteó: "En la TV Pública tratan a los jugadores de la Selección Argentina de 'desclasados' por no ir a la Casa Rosada. Sino puedo usarte, te destrozo. Esclavo o enemigo. Kirchnerismo en estado puro".