A pesar de las restricciones del Gobierno Nacional que impiden realizar reuniones sociales, la policía bonaerense clausuró una comunión que se estaba realizando en un predio al aire libre en el partido de Almirante Brown, debido a unos vecinos que denunciaron un evento masivo.
En el lugar, estaban presentes los chicos, los padres, el coro, los músicos y el cura que se enfrentó a los policías. “Se tomó la temperatura antes de entrar, estábamos en bancos separados y con barbijos con intención de no perjudicar a nadie ni perjudicarnos”, justificó Valeria, la madre de uno de los chicos que asistieron al evento.
La mamá también contó que era la tercera o cuarta vez que le suspendían la comunión y que se enteraron el día anterior de que se iba a llevar a cabo el evento. “Todos fuimos de buena fe, creyendo que estaba todo habilitado”, explicó Valeria.
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“A 5 cuadras del predio había una plaza llena de gente sin ningún tipo de protocolo, hay ferias habilitadas y también pasó el festejo de la hinchada de Rosario Central después del partido”. “Denuncian la comunión y no están atentos a otro tipo de denuncias que se deberían hacer”, manifestó la madre.