Desde este miércoles entran en vigencia las nuevas medidas de seguridad requeridas por Estados Unidos para todos aquellos viajeros que quieran ingresar a ese país y lleven en sus equipajes de mano computadoras y tablets. El pedido del gobierno de Donald Trump, que busca detectar presencia de explosivos y evitar posibles ataques terroristas, afectará a dos de cada diez pasajeros de forma aleatoria.
Las empresas deberán instalar escáneres llamados Explosive Trace Detection (ETD). Estas máquinas se presentan en diferentes modelos: algunas poseen un pico, como si fuera una pequeña aspiradora de mano, que absorbe partículas y vapores. Hasta el momento, la compañía aérea Latam sería la única de todas las que ofrecen vuelos directos desde Argentina a Estados Unidos, que cuenta con los equipos necesarios para realizar las inspecciones.
Estos equipos "llegan a detectar una presencia muy pequeña de explosivos, que sería como un grano de arena en una pileta de natación. O sea que aún cuando da positivo no nos quiere decir que hay un explosivo. Puede haber sido que la persona que manipuló el equipaje estuvo en contacto con un explosivo", explicó Oscar Rubio, director de AVSEC, un área de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA), al diario Clarín.
La medida que busca detectar materiales explosivos, se realiza a dispositivos electrónicos mayores en tamaño que un smartphone y es expresamente un pedido del Gobierno de Estados Unidos que recae directamente sobre las aerolíneas de todo el mundo, que contratarán a su vez empresas de seguridad privadas para realizar los chequeos.
El primer vuelo con "nuevas medidas" de seguridad correspondió a uno de Aerolíneas Argentinas que partió este miércoles con destino a Miami. Para el nuevo protocolo exigido por el país del norte no se usaron los escáneres requeridos, dado que la compañía de bandera aún no cuenta con los equipos especiales para la detección de explosivos, motivo por el cual (según habían adelantado) realizaron los chequeos a computadoras, tablets, cámaras y GPS con perros entrenados.
La implementación de los flamantes controles había sido anunciada por Estados Unidos a finales de junio. En la misma, constaba que la Argentina era uno de los 105 lugares desde los cuales se aplicará la disposición que entró en vigencia este 19 de julio.
En esa ocasión, el secretario de Seguridad Interna, John Kelly, se refirió al tema y precisó: "Debemos implementar medidas generales para garantizar la seguridad de los pasajeros y hacer que para los terroristas sea más difícil tener éxito". Y agregó: "Que nadie se confunda: nuestros enemigos trabajan constantemente para hallar nuevos métodos de ocultar explosivos, reclutar informantes y secuestrar aeronaves".
El funcionario reveló que las amenazas a las empresas aéreas no han disminuido: "De hecho, estoy preocupado porque estamos viendo un renovado interés de parte de grupos terroristas en el sector de aviación, pasando a atacar aeropuertos, como hemos visto en Bruselas y Estambul" indicó.
Al conocerse la noticia semanas atrás, la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) emitió un comunicado donde detalló: "La Argentina es uno de los 105 países desde los cuales se aplicarán nuevas medidas de seguridad pedidas por Washington, las cuales entrarán en vigencia en las próximas semanas y meses para todos los viajes a Estados Unidos, o enfrentarán un veto en la cabina de pasajeros de aparatos electrónicos más grandes que un celular, informó el gobierno norteamericano".
"Las medidas han sido requeridas directamente a los explotadores aéreos, es decir, a las aerolíneas que operan vuelos directos hacia Estados Unidos, las cuales deberán habilitar tecnología apropiada y personal para atender las demandas", añadieron.
"Un pasajero que se dispone a embarcar desde Argentina, deberá pasar por los controles habituales de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) y la Dirección Nacional de Migraciones (DNM). Ahora, además, en la manga o puente de embarque, su equipaje de mano tendrá que ser controlado también por la aerolínea, que determinará si los dispositivos electrónicos portátiles que lleva pueden o no ingresar a la cabina de la aeronave. La prohibición está dirigida a mitigar posibles amenazas como, por ejemplo, el uso de artefactos explosivos improvisados, disimulados o camuflados", ejemplificaron.
"Es recomendable consultar a la aerolínea antes de viajar para evitar inconvenientes debido a que cada una puede implementar medidas diferentes para satisfacer los requerimientos de la Administración de Seguridad en el Transporte (TSA) de los Estados Unidos", concluyeron desde la PSA.