Bajar la edad de imputabilidad: para la ministra Montero, abrir el debate “no soluciona nada”
Tras su primera semana en una cartera sensible del Gobierno de Córdoba, la funcionaria sentó postura sobre el encierro y la baja en la edad de imputabilidad.
Liliana Montero, ministra de Desarrollo Humano provincial. |
CEDOC
La nueva ministra de Desarrollo Humano provincial, Liliana Montero, argumentó su visión respecto al debate por bajar o no la edad de imputabilidad en el Código Penal. Para la licenciada en Psicología, esta discusión “aparece cada vez que no se quieren ver las cuestiones de fondo”.
En la primera entrevista como titular de la cartera que tiene dentro de su órbita a la Secretaría de Niñez Adolescencia y Familia (SeNAF), a cargo de la protección de los niños, niñas y adolescentes víctimas de violencia intrafamiliar o en conflicto con la ley penal, Montero expresó a PERFIL CÓRDOBA que dar el debate de la edad de imputabilidad “calma, pero no resuelve”.
“Lo que aporta soluciones es abordar las problemáticas de fondo, qué hacemos con los pibes que no terminan la escuela, con el narcotráfico y el consumo problemático de sustancias”, apuntó la mujer que en su faceta profesional tiene expertise como terapeuta de niños y niñas.
Según la ministra, la incidencia de menores en el marco general del delito “es ínfima”. “El niño es el emergente de una situación familiar y social. No debemos quitar responsabilidad a la familia y a la comunidad como si hubiera nacido de un repollo. La violencia no es un acto individual”, explicó.
Como responsable del área, en los primeros días de gestión visitó el Complejo Esperanza para conocer de primera mano las condiciones del lugar. En 2014, cuando era legisladora opositora, Liliana Montero había presentado un Habeas Corpus por la situación deplorable que presentaba el alojamiento para menores de edad en conflicto con la ley penal.
“Son necesarios todos los abordajes posibles, individuales y sociales para analizar por qué un pibe de 13 años empuña un arma. Nos calma encerrarlo, pero eso no resuelve el problema. Hay que abordar el problema con las víctimas y con los victimarios, sus familias y sus contextos donde están las verdaderas causas de esa conducta”, dijo la ministra a PERFIL CÓRDOBA.
