Pasó escándalos, sobrevivió a 13 presidentes, vio a Arsenal campeón y todavía sigue en pie

1. En 2003, respondió: “Los judíos no llegan a ser árbitros de Primera División en Argentina porque el mundo del fútbol es algo difícil, trabajoso y a los judíos no les gustan las cosas difíciles”. Después echaron a Ramiro Sánchez Ordóñez, el periodista que hizo la pregunta en su programa de TyC Sports.
2. Germán Lerche fue ladero de Grondona y hasta su asesor: lo convenció de que la cancha de Colón fuera sede de la Copa América y de que echara a Batista, tras la eliminación. El affaire terminó mal. El dirigente fue expulsado hace unos días hasta como socio de Colón.
3. La huelga de árbitros de 1992 por Castrilli fue derrumbada de modo maquiavélico: los partidos fueron dirigidos por jueces del Sadra, un sindicato paralelo al de la AAA. El paro quedó aplastado bajo el sillón de la calle Viamonte.  
4. Bolivia le ganó 2 a 1 a Argentina, por las Eliminatorias de Francia 98, y el final fue un escándalo. Tras un golpe, Julio Cruz se tiró al piso y se tomó la cara. En el vestuario, apareció con un corte en una mejilla; era la otra mejilla. Una simulación orquestada.
5. Las recetas para remediar la violencia fueron prometidas ante cada muerte en las canchas. Nunca solucionado el problema, la última gran promesa fue el AFA Plus: se iba a implementar en este campeonato.
6. Si bien nunca dirigió un partido, hasta el año pasado, Grondona fue el presidente del Colegio de Arbitros. Durante 18 años ese cargo lo ocupó Jorge Romo, ex proveedor de su ferretería.
7. Argentina se jugaba en el repechaje su pasaje a Estados Unidos 94. “Grondona nos dijo que en ese partido no habría control antidoping”, denunció Maradona 18 años después de aquel encuentro con Australia. Diego patentó otra frase: “Hubo café veloz”.
8. Bielsa fue símbolo de su política de continuidad de proyectos con entrenadores de la Selección. A pesar del fracaso en 2002, el DT siguió en el cargo. Hasta que se quedó “sin energías”. El trasfondo fue otro: Bielsa no soportó comulgar más con los manejos de la AFA.
9. Los promedios son un capricho inédito: ninguna liga importante del mundo define sus descensos con ese sistema. Un caso testigo de la ridiculez es Argentino de Rosario: en 1989 salió subcampeón en la Primera B y descendió. Actualmente, a Colón le podría suceder lo mismo.
10. La frase da vueltas en las rondas de charlas en off con los dirigentes: “AFA rica, clubes pobres”. El sistema de prebendas mantiene a los clubes en obediencia debida.
11. El secretismo deja la gestión sin transparencia. Los dirigentes se encolumnan en el “síjulismo” por temor a represalias con sus equipos. PERFIL intentó llegar al contrato de AFA con Adidas consultando con presidentes de clubes de Primera. Ninguno sabe cuál es el monto.
12. El libro Guinness debería estudiar seriamente el caso del fútbol argentino. Grondona atravesó ocho reelecciones y un solo voto en contra. La única vez que un sufragio no llevaba su apellido fue en 1991, cuando se presentó un opositor: Teodoro Nitti.
13. Los dólares de los nuevos ricos rusos también llegaron a las arcas de la AFA. O no.  Misteriosamente, el anuncio de millones para el fútbol argentino se frustró. En 2006 se rompió el contrato, cuando aún faltaban 12 amistosos por organizar.
14. En 1999 se creó el Tribunal de Cuentas con el fin de controlar a los clubes. Nunca hubo sanciones por cuestiones económicas. A Colón se le descontaron seis puntos por orden de FIFA, tras una denuncia del Atlante de México por la falta de pago de Juan Falcón.
15. El descenso de River se consumó en junio de 2011, pero antes hubo una pelea entre Passarella y Grondona. “Ya estás grande, correte”, le dijo el presidente de AFA luego de un superclásico en el que River sufrió errores arbitrales. La contestación fue lapidaria: “Comprate un arquero”. En una de sus últimas conferencias de prensa, el Kaiser fue sugestivo: “Después de discutir con Grondona, ni Guardiola ni Mourinho salvaban a River”.
16. La Constructora Deportiva SA es propiedad de Genaro Aversa, el único yerno de Grondona. Aversa llevó adelante las obras en los estadios de All Boys, Real Arroyo Seco, Atlanta y la remodelación del estadio de Colón, como sede de la Copa América 2011.
17. El reconocimiento a la Generación del 86 llegó vía selecciones juveniles. Con Humberto como nexo, los ex campeones del mundo dirigieron a los más chicos: fracasaron Garré, Batista y Trobbiani, que se quedó fuera del Mundial sub 20 de Turquía. Antes, con Checho, la Selección sub 20 no se clasificó para Egipto 2009.
18. Durante su gestión hubo 171 muertes en el fútbol argentino. Hace poco responsabilizó del asunto a los periodistas. Desde AFA, nunca se desterró a las barras bravas.
19. Grondona impulsó los torneos cortos: “La única diferencia es que, por año, hay dos campeones en vez de uno”. Después quiso volver a los largos. Hace un mes, su hijo Julio dijo que post Mundial de Brasil habrá treinta equipos en Primera. Sin plan concreto, la AFA tira su moneda al aire.
20. La triangulación de pases con equipos de Uruguay ameritó una investigación de AFIP hace dos años. En AFA estaban los registros en los que constaba las transferencias fantasma. Todo pasa.
21. Los tiempos de Mostaza Merlo tampoco fueron buenos para las selecciones juveniles. Antes de que Pekerman llegara al rescate con sus éxitos deportivos y el fair play, la Sub 20 de 1991 protagonizó un escándalo contra Portugal y la FIFA inhabilitó a la Argentina a disputar el Mundial de Australia 93.
22. AFA y TyC fueron socios durante 18 años. Grondona siempre ponderó a Carlos Avila, su primer hombre de confianza para el negocio de la televisación del fútbol. Después, Avila lo denunció por administración fraudulenta. Fue dos años después de que se implementara Fútbol para Todos.
23. Cuando AFA hacía negocios con Clarín, Grondona elogiaba a la empresa y nunca cuestionó el dinero que recibían los clubes. Cuando el Gobierno rompió ese contrato, el presidente se mostró enfático contra sus viejos interlocutores.
24. Oscar Ruggeri le pidió la quiebra a San Lorenzo en 2007 por una deuda y Savino estalló: le pidió a su amigo Grondona que pusiera a uno de los campeones del mundo en la lista negra. Ruggeri nunca más dirigió.
25. Fomentó la Copa Argentina, que aún no goza de prestigio. Varios partidos se juegan en provincias ajenas a los equipos que se enfrentan y, encima, con tribunas despobladas.
26. Proyectó a Julio Comparada. Lo incluyó en la sociedad Puntogol, de la cual se dice que es parte. Y consiguió que la compañía de seguros El Surco, del entonces presidente de Independiente, fuera la única autorizada por el Estado para cobrar por cada espectador en los estadios.
27. Sólo dos equipos no descendieron de la Primera A: Boca y Arsenal. Desde que ascendió en 2002, el equipo de Sarandí, además, ganó un torneo local (Clausura 2012), la Copa Sudamericana, la Copa Argentina y la Supercopa Argentina. ¿Incidencia de árbitros? “Es un mito que beneficien a Arsenal”, señala Germán Delfino.
28. Antes de asumir como DT de Independiente, Brindisi llamó a Grondona para que diera su visto bueno. La reunión para la llegada del entrenador fue en la casa de Guillermo Marconi, titular del Sadra. Y, además, hincha de Independiente. Asuntos mezclados.
29. Grondona echó a Batista tras la eliminación de Argentina en la Copa América disputada en el país. Rompió con su regla de no despedir entrenadores.
30. “A Maradona lo elegimos con Humberto. Era una gran oportunidad para inflar a la Selección argentina por lo que él genera en el mundo, como imagen mundial”, dijo Julito. Nepotismo puro.
31. ¿En qué quedó la cámara oculta que le hicieron a Grondona? En la grabación se escuchaban amenazas: “Yo no me puedo dejar seguir cogiendo por Fantino... No, se acabó. Ni a Juan Cruz (Avila, el productor del programa El show del fútbol), ni a quien quiera. Pero si los puedo matar, los voy a matar”.
32. La cinta es parte de una investigación realizada por Mariano Cúneo Libarona, quien acusó a Grondona de “administración fraudulenta” ante la Justicia. El abogado lo sindica por tener a su nombre cuentas millonarias en Suiza.
33. Los dirigentes de Vélez quisieron hacer valer la ley: Santiago Silva no podía jugar en Boca, su tercer equipo en una misma temporada. Al final, Grondona gritó fuerte y se impuso: Silva se puso la camiseta xeneize.
34. Luego del sorteo del Mundial 2014, los rivales de Argentina eran de poca cotización: Irán, Serbia y Nigeria. Conocido el grupo, Juan Carlos Crespi miró a Grondona e hizo el gesto de “la ley”, al apoyarse dos dedos sobre un hombro.
35. Varios medios uruguayos, entre ellos El País y La República, afirmaron que Julio Grondona “extorsionó” a Peñarol, Nacional y otros siete clubes para que no ratifiquen la denuncia penal contra la Conmebol