Mohamadou Dassi Gueye, un senegalés de 35 años, y David Diatta estaban perdidos y confiaron en las indicaciones del GPS. Sin embargo, cayeron a un embalse y Dassi Gueye se ahogó.
El GPS les indicó que siguieran derecho por el tramo de la EX-323, pero la oscuridad ocultó la señalización de prohibido el paso a la derecha de la carretera. Dassi Gueye se ahogó, mientras que su compañero se salvó.
"Lo hallaron a unos ocho o diez metros de la orilla", consignó el diario El País la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura, que condenó al Gobierno regional a indemnizar con 271.233,12 euros a los familiares del fallecido por "la mala señalización de la vía".
El trágico accidente ocurrió el 2 de octubre de 2010, a menos de dos kilómetros de Capilla (Badajoz).