A casi 72 horas de la desaparición del avión del Malaysia Airlines que viajaba el sábado rumbo a Pekín, para los investigadores no hay ninguna certeza. Es que después de dos días de estudio, los peritos descartaron que las manchas de aceite encontradas en las costas de Malasia sean del Boeing 777. "Este carburante no se utiliza en los aviones sino en los barcos", informó hoy la policía marítima de Malasia.
La mancha se encontraba a unos 185 kilómetros de las costas orientales de Malasia, cerca del lugar donde los controladores aéreos perdieron el contacto con el aparato. Más de 48 horas después de su desaparición, el misterio continúa sobre la suerte del vuelo MH370 que transportaba 227 pasajeros de 14 nacionalidades, entre ellos 153 chinos, y 12 tripulantes a bordo.
De esta forma, a pesar de los esfuerzos de búsqueda y rescate internacionales, aún no se han encontrado restos confirmados del avión de Malaysia Airlines desaparecido hace dos días y se abre un abanico de posibilidades. Para los investigadores, al día de hoy, cualquier cosa pudo haber pasado con el avión. En tanto, advirtieron a los familiares que estén preparados para "lo peor".
"Desafortunadamente, señoras y señores, no hemos encontrado nada que parezca pertenecer a la aeronave, por no hablar de la propia aeronave", dijo el jefe de Departamento de la Aviación Civil de Malasia, Azharuddin Abdul Rahman.
Lo que se sabe y lo qué no se sabe sobre el Boeing 777
Ahora, la investigación sigue dos líneas distintas: por un lado peritan los alrededores de una alejada isla vietnamita, donde un vuelo de esa nacionalidad dijo haber visto un bote salvavidas que podría pertenecer a la aeronave en cuestión. La aviación vietnamita avistó el domingo de noche, a unos 80 kilómetros de la isla de Tho Chu, al sur de sus costas, dos objetos que podrían provenir del vuelo MH370, que debía unir Kuala Lumpur con Pekín.
Por otro lado, surgieron nuevos datos sobre los dos pasajeros que abordaron el vuelo con pasaportes robados -que avivaron la hipótesis de atentado terrorista-. Luego de que se descartara que ambos pasajeros fueran de origen asiático, Abdul Rahman dijo que los dos hombres "se parecían a Mario Balotelli", el jugador de fútbol italiano de ascendencia ghanesa. Incluso, las autoridades malayas estarían investigando a cinco personas que nunca se embarcaron en el vuelo a pesar de haber hecho el chequeo, según consignó hoy el Wall Street Journal.
La pista iraní. Entrevistada por el Financial Times, la empresa admitió que el comprador de ambos boletos fue un intermediario iraní que cambió a último momento la reserva el pasaje con destino a Europa con otra compañía y una ruta de menor costo. Esto, en tanto alimenta la hipótesis de atentado, también podría tratarse de una simple inmigración clandestina, algo muy común.
Además, el vínculo entre los dos pasaportes europeos y la posible pista terrorista que investigan las autoridades pierde peso con las declaraciones de la agencia de viajes de Pattaya (Thailandia) que emitió ambos pasajes un día antes del vuelo.