La Dirección General de Aduanas aplicó una multa que alcanza los $7.350.469.600 tras haberse detectado ciertas irregularidades en la exportación de 11 obras de arte valuadas en sumas de considerable cuantía.
Precisamente, la multa fue aplicada a la firma exportadora y encargada del traslado de las obras, entre las que se encuentran involucrados cuadros de reconocidos artistas: Van Gogh, Cézanne, Monet, Renoir, Degas, Gauguin y Derain, Pissarro, Sisley y De Vlaminck.
Un halo de misterios sigue rondando a la familia Blaquier y su colección de obras de arte y lujo que por años se mantuvo bajo el más estricto secreto. Lo cierto es que la Aduana había dado autorización para la salida de los cuadros bajo el régimen de “exportación temporaria”, con el fin de que los cuadros participaran de una exhibición en Luxemburgo.
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Este especial régimen implica que la mercadería exportada queda libre y exenta de tributos, pero además que los exportadores asumen la obligación de reimportar al territorio nacional toda la mercadería que salió del país, respetando las fechas y plazos otorgados por el organismo de control.
Hasta allí todo parecía normal, sin embargo, una vez que las obras estuvieron ya fuera de Argentina, según lo alegado por personal de Aduana, los exportadores habrían informado que los cuadros no serían reingresados por lo cual solicitaron que se categorice a la exportación como definitiva. La realidad es que el proceso de investigación interna aún no fue judicializado, pero involucra la salida del país de once obras del patrimonio familiar valuadas por el Estado argentino en USD 350 millones con destino a Luxemburgo y a título gratuito.
Ello implica que no hubo ingreso de divisas, ya que el registro de transferencias fue a título no oneroso. Tras imputar entonces la Aduana, una autorización desvirtuada en su finalidad original de “exportación temporal”, el organismo aplicó la multa a la firma exportadora por cometer la infracción tipificada en el artículo 970 del Código Aduanero.
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Declaración jurada de obras de arte
Según se pudo conocer por fuentes de la Aduana, el trámite para exportar las obrasse inició en noviembre de 2019. Un detalle por lo menos llamativo: la anterior Resolución General N° 3.730 de la AFIP establecía la obligatoriedad del “Registro Fiscal de Operadores de Obras de Arte” y el envío de información sobre las “operaciones de compra y venta de obras de arte”, así como además, la “presentación de una declaración jurada anual a cargo de los titulares de dichas obras de arte”.
La AFIP dejó sin efecto la Resolución N°3730, en junio de 2019, quedando vigente solo la declaración jurada anual de obras.
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El misterio de la colección Blaquier
Lo cierto es que este caso está envuelto por el velo que por más de cincuenta años, cubrió de misterio la colección privada de obras de arte propiedad de la tradicional familia Blaquier. Pocos son los que pudieron tener acceso al secreto mejor guardado: como estaba integrada la colección completa en su galería privada de los grandes maestros emblemas del arte mundial.
Concretamente, la familia siempre fue renuente a realizar muestras públicas de su colección, como sí lo hicieron en varias oportunidades otros grandes coleccionistas como Amalia Lacroze de Fortabat o Eduardo Constantini. Tampoco prestaron ninguna de sus obras, sean esculturas o pinturas, para ser exhibidas en museos.
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De este modo, siempre se mantuvo en secreto el patrimonio pictórico de una de las familias de apellido con más historia en Argentina. Ahora, el empresario del imperio azucarero, Carlos Pedro, recientemente fallecido al igual que su ex esposa y madre de sus cinco hijos, Nelly Arrieta, dejaron los secretos en manos de su descendencia.
El misterio sobre el que todos sabían, pero no conocían
Convertido en un “misterio obvio”, que todos tenían casi enfrente pero de modo invisible, ahora se materializo repentinamente en una millonaria suma que se deberá pagar, tras la multa que superó los 7 millones de pesos.
Entre algunas de las obras exportadas se encuentran: la pintura de Van Gogh, “Una escena de rosas”, un lienzo de Edgar Degas, parte de su serie hípica “Avant La Course”. También la obra “Una escena floral” de Paul Gauguin y una de las obras más icónicas, una pieza de Claude Monet que muestra a sus célebres “Les Nympheas, sus lirios de agua”.
AO JL
