En un contexto de guerra en Ucrania, se generó un debate sobre el posible aumento para generar más ingresos en el Estado. Las distintas posturas dentro del Frente de Todos.
APORTE SIN RETORNO. En los primeros seis meses del año la producción agroindustrial generó derechos de exportación por más de US$3.600 millones. |
Cedoc
Nuria Am
El debate sobre el aumento de retenciones en el contexto de la crisis alimentaria que puede derivar de la guerra entre Rusia y Ucrania divide la biblioteca. Mientras están quienes consideran que es una gran posibilidad para aumentar las arcas del Estado en medio del aumento de los commodities, otros creen que va a haber menos productores dispuestos a exportar, y como consecuencia, mayor faltante de alimentos en el mundo.
Lejos del contexto del 2008, cuando el Gobierno de Cristina quiso aumentar las retenciones y esto derivó en poner el país nuevamente a las puertas de una crisis institucional, esta vez el debate se da tanto dentro del oficialismo como de la oposición. La herramienta es válida como instrumento de desacople de los precios internos de los valores internacionales y cómo método de mayor ingreso de divisas. Pero en la Argentina muchas veces se hizo abuso de ella y genera obviamente resistencia en el sector agropecuario.
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El ministro de Economía no está en desacuerdo con ello, pero considera que dos puntos no haría la diferencia hoy para el costo político que tendría. El Presidente planteó en las últimas horas que es una discusión que amerita se haga pública. Necesita del apoyo en el Congreso y hoy exhorta a ese arco político a dar el debate.
Todos los caminos conducen a Roma. El aumento en el valor del trigo es sostenido, y otros factores como el cierre de las exportaciones en India por ejemplo, que es el segundo mayor productor de trigo en el mundo, dejan a las puertas una discusión que excede a la de los halcones y las palomas. Toda crisis es una oportunidad. El tema, es saber aprovecharla.
