“Hoy son diez y contando, aunque para mí haya sido ayer. Qué difícil es esta ecuación, porque la variable de no tenerte me mata. Mañana será diez y un día y volveré a la carga. Hoy no mi amor, la tristeza y el horror me superan.” Jimena Aduriz eligió recordar a su hija Ángeles “Mumi” Rawson con un sentido mensaje a una década del crimen de la adolescente de 16 años. Lo acompañó con una foto de la menor con un gato. La mujer expresó su dolor más profundo y esa herida abierta que perdura a pesar del paso del tiempo.
Ángeles fue asesinada el 10 de junio de 2013 en el mismo edificio en el que ella vivía junto a su familia, en la calle Ravignani en el barrio porteño de Palermo. Por ese caso fue apresado y condenado a perpetua el portero de ese lugar: Jorge Mangeri.
El exencargado del edificio intentó abusar de la joven y la mató. Luego se deshizo del cuerpo tirándolo en un contenedor de basura con el objetivo de que no sea encontrado jamás. Pero el destino quiso que no fuera así. El cuerpo de la adolescente terminó en la planta de la Ceamse de la localidad bonaerense de José León Suárez donde se calificaba la basura de manera manual.
Los empleados se toparon con el cuerpo de la adolescente. En una de sus uñas los peritos, más tarde, encontrarían la prueba más fuerte contra el portero (más allá de su confesión inicial): el ADN de Mangeri.
Aquí el texto completo del escrito que compartió Jimena en sus redes sociales en un nuevo aniversario por el femicidio de su hija: “La primera década, porque es menos doloroso decir década que diez años, que no te tengo mi amor... Elijo que ese tiempo no sea sólo de descuento en la espera por volver a abrazarte y llenarte de mimos. Elijo transmitir tu legado. Mientras mi cuerpo sabe que esa elección cuesta más, y mi boca se enferma por lo que no puedo decir, mis mejillas se llenan de lágrimas no lloradas que parecen aferradas por miedo a que el día que las suelte me desintegre. Hoy son diez y contando, aunque para mi haya sido ayer. Qué difícil es esta ecuación, porque la variable de no tenerte me mata. Mañana será 10 y un día y volveré a la carga. Hoy no mi amor, la tristeza y el horror me superan. Te amo hasta el cielo de las nubes... Mami”.
Mangeri recién podrá salir en 2048
R.P.
Por el asesinato e intento de violación de Ángeles Rawson, fue condenado Jorge Mangeri, el portero del edificio en donde vivía la adolescente en el barrio porteño de Palermo. Su condena está firme y recién podrá salir de prisión dentro de 25 años. Pero el encargado analiza presentar un “recurso de revisión” de la causa para obtener ese beneficio antes de 2048.
Mangeri (55) hizo una presentación en 2022 “in pauperis” (escrita a mano desde el penal) bajo el título “Presenta queja por retardo de justicia”, en la que exigía al Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 9 de la Capital Federal “contar con copia de la totalidad del material fotográfico y fílmico obrante en la causa N° 29.907/2013” (el crimen de Ángeles). El motivo, explicado en otra presentación por la defensora oficial ante ese tribunal que en ese momento lo asistía, Laura Ayala, es que Mangeri quería esas piezas de la causa para cuando decida “encauzar el recurso de revisión”.
“Cuando la sentencia ya está firme y no quedan apelaciones, el recurso de revisión es la última oportunidad que tiene un condenado para intentar revertir un fallo, pero también es algo muy complejo y extraordinario para que lo habiliten. No se puede cuestionar la prueba ya evaluada, sino que debe surgir un elemento nuevo. La idea de Mangeri es intentarlo también ante tribunales internacionales”, dijo a Télam una fuente judicial ligada al expediente.
Mangeri fue condenado a perpetua en 2015. Recién estará en condiciones de pedir la condicional, dentro de 25 años, en 2048, cuando tenga 80 años y luego de haber pasado 35 en prisión.