Antes de mantener la reunión clave con los líderes que nuclean a las agrupaciones agrarias, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner anuncia un plan nacional para pelear contra la inequidad y la pobreza en la Casa Rosada.
"Alicia y Graciela son la combinación perfecta, arrolladora y con serenidad. Lo común en ambas es ponerse objetivos y poner todos para lograrlos", elogió la mandataria a su cuñada, la ministra de Acción Social, y a la titular de la cartera de Salud. "Este plan va a llegar a más de 6 millones de argentinos, algunos de conglomerados urbanos, otros en los pueblos rurales", apuntó.
"La inequidad no sólo es social, sino que tiene un profundo contenido territorial. Inequidad territorial, fundamentalmente ubicada en el NOA Y NOE. Todos los argentinos tenemos una deuda con estas regiones", aseguró.
Apelando a su "rigor intelectual", criticó al campo al afirmar que las retenciones para todos los productos representan el 13% y de ese 13% "sólo el 7,9 corresponde al sector agropecuario".
Acto seguido, agregó que "dentro de ese porcentaje solo el 3,9 viene de quienes producen, el restantes corresponde a las industrias". La presideta argumentó sus declaraciones y dijo que "es bueno que los argentinos sepamos lo que cada uno aporta para ayudar a los que no tienen".