El gobernador de Córdoba, José Manuel de la Sota, criticó hoy la actitud de la Casa Rosada frente a los saqueos en su provincia, al advertir que "pareciera ser que los cordobeses tenemos que quemar nuestros documentos porque algunos no nos consideran parte de la Republica Argentina".
El mandatario confirmó que el martes próximo será recibido por el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich. "Vamos a reclamar que nos paguen lo que nos deben a los cordobeses", sostuvo el gobernador, del peronismo disidente.
Por la mañana, el jefe de ministros sostuvo que el acuartelamiento policial y los saqueos a los comercios en la capital cordobesa eran una cuestión "exclusiva" del gobierno de esa provincia.
Al mediodía, al anunciar el acuerdo que su administración alcanzó con la policía que reclamaba por mejoras salariales y laborales, el gobernador volvió a lamentar el trato que su provincia recibe de la Nación.
"Llamamos a todos los miembros del Gabinete pero respuesta no hemos tenido", advirtió De la Sota y remarcó que "es lamentable porque los saqueos se evitaban con la presencia de la Gendarmería".
El mandatario resaltó: "Esta madrugada puse un Twitter dirigido a la cuenta de la Presidenta (Cristina Fernández) reiterándole el pedido que estos saqueos ameritaban la presencia de la gendarmería. Lamentablemente no hemos tenido respuesta".
En cambio, el mandatario agradeció especialmente a su colega bonaerense, Daniel Scioli, y de dirigentes de la oposición como Sergio Massa, Mauricio Macri, Antonio Bonfatti, Julio Cobos y Graciela Ocaña por haber reclamado públicamente el envío de gendarmes a Córdoba para enfrentar los saqueos a comercios, en el marco del acuartelamiento de la policía provincial, según informó la agencia DyN.
