“Si le ponés un parche a la cubierta en cualquier momento se vuelve a pinchar, hay que cambiar toda la rueda”. Bajo ese argumento Sergio Massa le planteó a Alberto Fernández la posibilidad de asumir él como jefe de Gabinete y rearmar el equipo económico. Sin embargo, la portavoz Gabriela Cerruti confirmó esta mañana que no le ofrecieron ningún cargo al tigrense que, por ahora, sigue en la Cámara de Diputados.
La propuesta de Massa consistía en relanzar el Gabinete, con él en la conducción. Para que eso sucediera, pidió controlar las áreas más calientes de la economía argentina: el Banco Central y el Ministerio de Economía. Es ahí donde surgen Marco Lavagna y Martín Redrado, los dos nombres que sonaron en las últimas horas.
Este planteo también contemplaba que Juan Manzur, de buen vínculo con Massa, se hiciera cargo del Ministerio de Interior y que Wado de Pedro, la figura de Cristina Kirchner en el Gabinete, se quedara con la cartera de Justicia.
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“Por ahora el Presidente eligió cambiar figurita por figurita y seguir, vamos a ver cómo sale”, señaló ayer una fuente del massismo luego de que se conociera el nombre de Silvina Batakis para reemplazar a Martín Gumzán.
En el Gobierno, sin embargo, descartan que haya sido una opción posible lo que planteó el tigrense el domingo en Olivos. “Estuvo ayer todo el día con el Presidente, tiene una relación política muy cercana con el Presidente, es parte fundamental”, aclaró Cerruti en diálogo con Futurock.
“Por ahora el Presidente eligió cambiar figurita por figurita y seguir, vamos a ver cómo sale”
Así, descartó la posibilidad: “Tiene un rol importante en la Cámara de Diputados donde hay que sacar una cantidad de leyes importantes”. Lo hizo para explicar por qué no se sumará al Gobierno. “La evaluación de ayer tenía que ver con encontrar el reemplazo al ministro de Economía”.
Massa, el nombre que siempre suena
Esta no es la primera vez que el nombre de Massa tiene un lugar importante a la hora de definir un cambio en el Gabinete. Hace un mes, cuando se confirmó la llegada de Daniel Scioli, el titular de la Cámara baja quedó desencantado de la decisión de Alberto Fernández. Massa y Scioli son adversarios políticos hace varios años, la última versión fue en la elección de 2015 cuando el tigrense apostó por Mauricio Macri en la segunda vuelta electoral.
Los viajes a la Cumbre de las Américas y al G7 en Alemania ayudaron a retomar el vínculo. Sin embargo, Massa no participó del acto que hizo Fernández el viernes en la CGT.
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A partir de ahí, su entorno comenzó a insistir en que Massa era la persona correcta para sumar al Gabinete y desde su propio sector intentaron instalar en los medios que el Frente Renovador podía romper la alianza gobernante si seguían estos desencuentro y que Massa era la figura que podía salvar al Gabinete.
Una de las personas más cercanas que tiene en el Frente Renovador le dijo a PERFIL el viernes por la tarde que una potencial llegada de Massa al Gabinete "es lo único que puede generar una esperanza" de que no fracase el Frente de Todos. "Es la única posibilidad que tenemos de tener algo que funcione, reactive y levante. Hoy veo todo terrible". A su vez, esta fuente descarta la posibilidad de que el Frente Renovador rompa el Frente de Todos.
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El dato que llamó la atención el sábado por la noche fue que Massa no asistió a Olivos. En el Gobierno lo tomaron como un alejamiento del tigrense de las negociaciones y sorprendió a más de uno. Sus voceros explicaron que seguiría las conversaciones por teléfono, pero que iría al cumpleaños de la hermana.
También fue uno de los últimos en enterarse. Al momento que renunció Guzmán no estaba ni en el acto de Cristina Kirchner en Ensenada, ni almorzando con el Presidente. Fue a Victoria a ver a Tigre, que empató 1-1 contra Talleres. En la cancha no tenía señal y se enteró de la renuncia de Guzmán mientras volvía a su casa en el barrio Rincón de Milberg.
Por el momento, Massa sigue en Diputados y no habría más cambios en el Gabinete. Sin embargo, en Tigre nadie cierra la puerta: “Me temo que la pelota va a volver rápido”.
RI
