POLITICA
el debate de la ley de bases

El Ejecutivo muestra optimismo y se enfoca en los artículos conflictivos

Hasta el martes, el gobierno libertario se centrará en resolver los principales ejes de desacuerdo con los bloques aliados.

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La secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, y Manuel Adorni en el Congreso | Télam

El oficialismo se llevó un triunfo módico con la aprobación en general de la Ley Ómnibus en la Cámara baja, y es por ello que tiene por delante la difícil tarea de reunir los consensos de cara a la votación en particular en los que se definirá la verdadera suerte del texto, que comenzó con más de 600 artículos y perdió más de la mitad durante el trámite legislativo. El debate se retomará el próximo martes a partir de las 14 tras un cuarto intermedio. 

El oficialismo inundó las redes sociales de celebraciones tras la aprobación de la megaley y se mostró optimista de cara a la semana próxima. En Olivos, y antes de partir rumbo a Mar del Plata (donde visitó a su novia Fátima) el Presidente festejó el paso dado a nivel legislativo. “VIVA LA LIBERTAD CARAJO”, lanzó Milei en sus redes sociales. 

“Muy conforme. Esperamos que no la estiren más y se apruebe totalmente”, resumió una voz con trato diario con el Presidente ante PERFIL, para graficar el ánimo no sin dejar de evidenciar cierto fastidio por la dilación.  

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Sin embargo, el ministro Guillermo Francos y Martín Menem tienen todavía por delante la difícil tarea de reunir los votos para la aprobación en particular del articulado. Pese a que el Presidente ha enviado mensajes dando por terminada la etapa de negociación, fueron muchos los nombres que desfilaron por el Congreso durante la negociación. 

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Votación en Diputados. Fotos: Pablo Cuarterolo

La cuenta Oficina del Presidente celebró y envió un especial mensaje componedor para con los jefes de los bloques de la oposición dialoguista agradeciendo “especialmente la colaboración de los señores diputados y jefes de sus respectivos bloques, Cristian Ritondo, Miguel Ángel Pichetto y Rodrigo de Loredo, quienes, a pesar de nuestras diferencias, han contribuido para que la ley avance”.  

Luego de haber sostenido durante semanas que el “corazón” del proyecto era el paquete fiscal retirado, ahora el Gobierno ensaya un giro discursivo y pone el acento en las desregulaciones. “Hay que diferenciar las cuestiones de fondos de los temas de caja”, graficó una voz al tanto de las negociaciones. En concreto, explican que de no haber tantas regulaciones o empresas estatales mal administradas no habría déficit fiscal, principal causa de la inflación según la mirada de los libertarios. 

“Creo que va a salir en la misma línea”, sostuvo ayer Francos en una entrevista radial, mostrando optimismo. El Ministro del Interior viajará con Milei a Israel e Italia y quedará corrido del minuto a minuto de las negociaciones. 

En ese punto las versiones dentro del oficialismo se dividen. Mientras unos quieren la aprobación con celeridad, otros manifiestan la necesidad de continuar negociando. Es por ello que algunas voces libertarias son optimistas y se atreven a deslizar que podrían sumar más votos y que habrá que “dialogar hasta que duela”, para alcanzar los apoyos en las votaciones. 

Al mismo tiempo son conscientes de las realidades territoriales de cada provincia y es por ello que más allá de los dichos y trascendidos en las órbita presidencial, el ala encargada de asegurar la sanción de la ley seguirá conversando. 

Diputados

Tampoco se descarta la eliminación de algunos artículos, tal como sucedió tanto con el capítulo fiscal como con la reforma electoral. 

El principal foco de conflicto continúa siendo las negociaciones por las privatizaciones, las facultades delegadas conjuntamente con la declaración de las emergencias, el debate por el Impuesto PAIS, que quedó en medio de la disputa con los gobernadores quienes pretenden que el tributo se coparticipe y las autorizaciones por la toma de deuda. 

Por el momento no hay una voz en el oficialismo que pueda dar una definición y según se estima, la negociación se estirará hasta el propio momento de la votación cuando todavía hay tiempo para modificar el articulado. 

Sin embargo, no todo es optimismo en el oficialismo. ”Estamos muy finos”, reconoció ante PERFIL una voz libertaria inmiscuida en las conversaciones. Y es que son conscientes de que los 144 votos afirmativos obtenidos en la votación en general del proyecto, no se traducirán automáticamente a la votación artículo por artículo. 

En el oficialismo creen que si se coparticipa el Impuesto PAIS será muy difícil eliminarlo en el futuro, sobre todo si se coparticipa. También creen que podría aprobarse el capítulo de las privatizaciones y que luego se discutan los pliegos empresa por empresa en el Congreso. 

Pichetto ya advirtió que las discusiones sobre privatizaciones deberá ser empresa por empresa. En tanto los gobernadores han puesto el grito en el cielo y continúan reclamando la suba de fondo coparticipables. En concreto, propusieron recibir a través de un fondo fiduciario el 21% del Impuesto PAIS con el mismo destino que tiene actualmente: urbanizar barrios vulnerables. Todo indica que las definiciones llegarán al momento de la votación.