“Tenés que hablar con él”, dijo inmediatamente Alberto Fernández, con una sonrisa, mientras un dirigente le pedía que le habilitaran fondos. “Él” era Sergio Massa, quien también entre risas respondió: “Nooo, hay que hablar con el Presidente”. La escena se dio en la primera actividad conjunta que compartieron el Presidente y el ministro, en medio del reacomodamiento en el funcionamiento del Frente de Todos, en el que el tigrense cobra un fuerte protagonismo.
Alberto Fernández entiende más que nadie que este es el momento de Sergio Massa. Después de resistir su desembarco, ahora sabe que lo debe dejar ser y hacer. El jueves por la noche, y por chat, habían acordado encontrarse el viernes para terminar de definir algunas medidas económicas, y fue ahí que el jefe de Estado lo invitó a participar del acto de reactivación del tren que conecta Cañada de Gómez con Rosario. El viaje sirvió para repasar el comportamiento de los mercados durante la semana y avanzar con los anuncios que el ministro de Economía, Producción y Agricultura promete para los próximos días.
Ya durante el acto hablaron el Presidente; el gobernador santafesino, Omar Perotti; el ministro de Transporte, Alexis Guerrera, y la intendenta de Cañada de Gómez, Stella Maris Clérici. Todos menos Massa, a quien le ofrecieron hablar pero prefirió no hacerlo y dejar que fueran las palabras de Alberto Fernández las que resonaran.
El jefe de Estado volvió a dejar en claro que en las últimas semanas priorizó la unidad del Frente de Todos, por lo que terminó aceptando cambios y enroques en el Gobierno, al asegurar que siempre “luché y lucharé por la unidad”. Sobre la crisis económica, el Presidente planteó: “Veo a veces desesperanza en nuestros compatriotas, que se plantean que en la política todo es lo mismo, y la verdad es que las cosas no son así. Estos son momentos para que pensemos que no todo es lo mismo”.
Ante las declaraciones de Sergio Massa sobre la necesidad de cumplir con las metas de déficit fiscal acordadas con el FMI y la necesidad de un ajuste, Fernández insistió en que no vendrá por el lado de la obra pública. “Sergio sabe, como yo, la obligación que tenemos con cada uno de ustedes. Y esa obligación no va a parar, como no va a parar ninguna de las 5 mil obras públicas que estamos haciendo, ni ninguna de las cien escuelas técnicas ni las 120 mil viviendas que estamos construyendo a lo largo del país. Porque nuestro deber está con ustedes, no con otros”, advirtió el jefe de Estado.
Horas después del acto, Alberto Fernández viajó rumbo a Colombia para participar de la asunción del presidente, Gustavo Petro. Allí también mantendrá tres encuentros bilaterales. Además de reunirse con el colombiano, también lo hará con sus pares de Bolivia, Luis Arce, y de Honduras, Xiomara Castro.