Cristina Fernández de Kirchner viajó a Entre Ríos a inaugurar cuatro tramos de la ruta 14 en la provincia de Entre Ríos.
Anunció el llamado a licitación para la ruta 11, "una obra muy importante", señaló y dijo que le dio las intrucciones al ministro de Economía para que comiencen a trabajar. Dijo, además, que hay una "nueva Entre Ríos" y que cada una de las provincias argentinas fueron transformadas y casi "dadas vuelta".
Habló de la competitividad de las industrias y criticó a los que se callan cuando a la Argentina les cierran los mercados. "Ahora los pollos los comen los argentinos porque tienen plata y trabajo o los vendemos afuera", señaló, al referirse a la industria avícola, vital en esa provincia.
"Somos un país profundamente democrático", dijo, al defender que los jóvenes puedan debatir sobre política donde quieran, dijo, con gran vehemencia en su discurso. Comparó a la oposición con el stalinismo y dijo que los que se dicen liberales tienen prácticas regímenes totalitarios.
"A mí no me importa que me injurien ni me parodien", dijo, haciendo clara referencia al caso de los docentes de la ciudad de Buenos Aires y a la imitación de Fátima Florez. "Lo que me importa es el cariño de la gente, remató".