El ministerio de Trabajo dispuso hoy un "cuarto intermedio" hasta el miércoles 21 de enero en la discusión que la empresa Siderar mantiene con los representantes gremiales de sus trabajadores, debido a su decisión de echar 2400 obreros metalúrgicos y de la construcción que se desempeñan en su planta siderúrgica de la localidad bonaerense de San Nicolás.
La medida fue dispuesta al término de una audiencia de más de dos horas en la sede de la cartera laboral, en la que, según declaró Luis Sánchez (vocero de prensa de la UOM-San Nicolás), el ministro de Trabajo, Carlos Tomada, "ratificó la preocupación de la presidenta Cristina Fernández en el tema".
Según el gremialista, Tomada aseguró que "se encuentra trabajando" con el ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, en "procura de alguna alternativa viable para evitar el despido masivo", de trabajadores. Sánchez acusó asimismo a la empresa del grupo Techint de haber ratificado su decisión de suspender las inversiones que tenía proyectadas para este año porque "es inviable la reparación de un alto horno con los 2400 compañeros adentro".
El sindicalista también adelantó que el Ministerio de Trabajo convocó a las partes a una nueva audiencia para el próximo miércoles a las 15, y recordó que la conciliación obligatoria que dispuso la cartera laboral en el diferendo rige hasta el 22 de enero próximo.
Consultado sobre el clima que viven los trabajadores de la planta de Siderar en San Nicolás, Sánchez aseguró que "si bien por ahora todos están en sus puestos de trabajo, nadie sabe qué va pasar cuando termine la conciliación".
El conflicto en la siderúrgica se suscitó luego de que en, plena crisis económico-financiera, Siderar anunciara la suspensión de las inversiones que venía realizando para la puesta a punto con tecnología de punta de un alto horno para la producción de planchas de acero.
Ante esta situación, la compañía resolvió el despido de 2400 trabajadores metalúrgicos y de la construcción que se desempeñan en la planta de San Nicolás, mientras que otra cantidad importante de personal sería despedido en marzo próximo.
La rápida intervención del Ministerio de Trabajo, que dispuso la conciliación obligatoria el viernes pasado, evitó al menos por ahora el despido masivo de trabajadores, que generaría un verdadero caos socio-laboral en la zona.
Para el Gobierno, las ganancias que tuvo Siderar en los últimos dos años pueden considerarse "extraordinarias", en tanto que la inversión que tiene que realizar para continuar produciendo "es mínima frente a las ganancias que obtuvieron".
Fuente: DyN.