"A diferencia de (Martín) Menem, acá no hizo una cacería para rajar gente. Ella entendió al establishment del Senado y no viene a chocar con nadie". Las palabras vienen de un empleado del Senado de la Nación que definió así a la vicepresidenta y titular de la Cámara Baja, Victoria Villarruel. Desde que asumió como compañera de fórmula de Javier Milei, la vice pasó por momentos críticos y ahora busca bajar el perfil y la exposición, sobre todo luego de haber reproducido la versión de un medio británico que la definía como "dispuesta a todo".
El 10 de diciembre Villarruel esperaba tener todo listo para desembarcar con su equipo en los ministerios de Defensa y de Seguridad. Las dos áreas terminaron en manos de la fórmula del extinto Juntos por el Cambio: Luis Petri y Patricia Bullrich.
Enfrentada con Karina Milei y por ende con todo el círculo cerrado del Presidente, a los pocos días se tomó revancha en el recinto. Es que Milei pidió que fuera Francisco Paoltroni el presidente provisional del recinto. Pero Villarruel operó para ubicar a alguien de su confianza, Bartolomé Abdala. "La casta me dio la bienvenida", dijo Paoltroni con la derrota consumada. "¿Para qué jugó tan fuerte por algo así?", se lo escuchó decir a Milei en reuniones dentro de la Casa Rosada.
Victoria Villarruel: por qué se convirtió en tendencia
Cautela con el Senado y reuniones con Macri
Villarruel nombró a Agustin Gustinian como secretario parlamentario, un político conocedor del reglamento interno, que trabajaba con Federico Pinedo y puso de secretaria administrativa a la experimentada María Laura Izzo. A diferencia de lo realizado por Menem en Diputados, no exigió -aún- la presencialidad del trabajo para los empleados y el canal Senado TV mantiene la estructura que dejó la administración anterior. "No puede pelearse con el Presidente y el Senado al mismo tiempo. Es como si nos hubiera puesto de su lado", graficó un senador radical a PERFIL.
Pero el mayor ruido para la corta carrera de Villarruel en el poder llegó semanas atrás cuando se filtró que se había reunido en más de una ocasión con el expresidente Mauricio Macri, también en cortocircuito con Milei desde que el mandatario desistió de entregarle lugares de poder que Macri pensaba para él.
A las pocas horas de conocerse de las reuniones, el medio británico Financial Times escribió un contundente artículo donde dejaba en claro que ella estaba dispuesta a asumir el poder en caso de que Milei tuviera que correrse. La conjetura, de gravedad institucional, fue replicada por la cuenta oficial de la vice. Ante el escándalo político, decidió borrar la publicación. El mensaje ya había llegado a la Quinta de Olivos.
Estos últimos movimientos pusieron a la vicepresidenta el el ojo de la tormenta y en la lupa de libertarios que comenzaron a criticar su manera de moverse "a contramano de lo que pide el Presidente". Inclusive a nadie le llamó la atención que no estuviera en reuniones de gabinete.
"Cuando dejó correr la versión del medio inglés fue un golpazo para la confianza que le tenía Javier. Las consecuencias de eso aún no se ven". Quizás un prueba de ese enojo quedó demostrado cuando Villarruel no pudo aprobar la boleta única por disidencias de senadores que responden a fuerzas provinciales. Sin la intermediación del Poder Ejecutivo, fue imposible.
Vuelo propio y pelea con Peteco Carabajal
Sin perder tiempo, Villarruel siguió con vuelo propio. Comenzó a recorrer el país, estuvo en Córdoba con el gobernador peronista Martín Llaryora (a quien la vice mencionó como "Federico") y se mostró en el Festival de Jesús María, con polémica incluida por los dichos sobre su figura del Peteco Carabajal. "Ella no va a detenerse en un triunfo o una derrota coyuntural del poder. Lo demostró esta semana", apuntó un dirigente de LLA que habla seguido con la vice.
Ahora, ante el viaje de Milei a Davos, Villarruel debutó al frente del Poder Ejecutivo. Para no levantar más polvareda, bajó de manera estricta el perfil, evitó las fotografías como "Presidenta" y se mantuvo abocada a su rol del Senado. Ya habrá tiempo para mover otra pieza en la estructura del poder.
RI/ff
