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Sobriedad en la foto oficial de la corona holandesa

Sin fasto ni joyas, Máxima y su familia apelan a la proximidad con el pueblo de su país.

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Juntos. Erwin Olaf, fotógrafo holandés, los retrató en marzo pero ayer hicieron pública la foto. | casa real holandesa

El día de ayer, la reina Máxima exhibió a través de las redes sociales de la corona holandesa el tradicional saludo navideño. En este se la puede ver posando junto a su esposo, el rey Guillermo, y sus tres hijas. Tomando a todas las monarquías europeas, fueron los últimos en hacerlo y llamaron la atención por sus gestos adustos. Sin embargo, esto responde a una intención que tienen desde la institución en mostrarlos más cercanos al pueblo. Por ese motivo, al igual que el año pasado, optaron por una imagen donde se puede ver a los cinco con vestimentas sencillas, de colores oscuros, y sin ornamentos ni joyas. Para cerrar desearon “Feliz Navidad y un próspero Año Nuevo” en diferentes idiomas.

El cuadro fue realizado por Erwin Olaf, un reconocido fotógrafo holandés cuyo arte, según destacan algunos artículos, es una mezcla explosiva entre el fotoperiodismo y la fotografía en estudio, que impacta para bien o para mal. No deja indiferente a nadie. Su despegue internacional fue en 1988, cuando ganó el primer premio en el concurso para jóvenes talentos Young European Photographer Competition.

La sesión con la familia real tuvo lugar en el palacio de Amsterdam en marzo de este año y también se llevaron a cabo varios retratos oficiales de  Amalia, Ariane y Alexia. Por el momento solo se dieron a conocer algunos pocos pero se espera que en los próximos meses se exhiba el resto.

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De esta forma, Máxima finaliza un año difícil para ella. Tras el suicidio de su hermana Inés en junio, tuvo que viajar de urgencia al país y acompañar a su madre. Eso la llevó a cancelar su agenda oficial y a permanecer más días en Argentina. De todos modos, no fue su única visita al país durante 2018. Hace pocas semanas estuvo presente en el G20, donde participó de un encuentro de las Naciones Unidas. Allí estuvo como defensora especial del secretario general de la ONU ya que participa en un programa para el financiamiento inclusivo para el desarrollo. Además, tuvo un encuentro oficial con Macri y  sobre todo con Juliana Awada.

Más allá de los problemas, a principios de diciembre Máxima pudo festejar los 15 años de Amalia, su hija mayor. Con la familia y unas pocas amigas. Según sus propias palabras fue algo tranquilo debido a que Alexia tenía exámenes que rendir. Sin embargo, sumado a los festejos navideños, fue un momento de felicidad que ayudó a revertir el difícil 2018 que vivió la familia.