Un menor de 13 años, identificado como Lucas Flores, falleció esta madrugada de modo accidental tras tomar contacto con un cable de alta tensión, desprendido en el barrio San José por el viento que acompañó el temporal que azotó a la capital de Corrientes.
El niño, que se desempeñaba en las divisiones inferiores del club de fútbol Boca Unidos, había salido para cooperar por la urgencia devenida del temporal en su barrio, consignó la agencia Télam.
Por otra parte, 16 familias fueron evacuadas y trasladadas a la escuela 299 del barrio Galván, debido al anegamiento de las viviendas cercanas a una zona de escurrimiento natural de la ciudad, donde unos 150 milímetros de lluvia se precipitaron hasta esta mañana.
“En solo 40 minutos cayeron 80 milímetros de agua esta madrugada, a las 3 aproximadamente, lo que significó un caudal muy grande para tan poco tiempo lo que extralimitó la capacidad de escurrimiento de la ciudad”, dijo el jefe de Operaciones de la Dirección de Defensa Civil de la provincia, Orlando Bertoni.
Asimismo, alrededor del 45 por ciento del ejido urbano permanece sin suministro eléctrico por el derribo de postes y cables, así como árboles, que obliga a la Dirección Provincial de Energía de Corrientes a trabajar “con cuadrillas reforzadas”, se informó oficialmente.