Un hospital de la localidad bonaerense de Moreno se encuentra en la mira de la justicia después de cremar a una bebé muerta sin el consentimiento de su madre. Belén Orellana, madre de la niña, denunció no le permitieron ver a su bebé y que la cremaron de inmediato. Sin embargo, las autoridades del centro asistencial afirmaron que esperaron 72 horas a que reclamara la familia y ante su ausencia tomaron esa medida, "como dice la ley". Lucas, papá de la beba, reveló que nunca les hablaron sobre la cremación, porque "desecharon" el cuerpo.
Los directivos del hospital hicieron un repaso de la historia clínica de la mamá y detallaron que "ingresó el 1 de mayo con contracciones, sin ningún tipo de control prenatal previo". "Se le hicieron los estudios que corresponden y se constató que el bebé no tenía latidos en una ecografía", relató Mabel Kurzman, licenciada en Obstetricia. Por este motivo, Orellana fue internada y horas después dio a luz "una beba fallecida con un importante grado de descomposición".
Según Kurzman, hacía más de cuatro días que la beba había muerto: "Le avisamos a la mamá y a la abuela del fallecimiento y les dijimos que se podía conocer la causa de la muerte del bebé, pero ambas coincidieron en no hacerlo porque no querían saberlo", en referencia a la posibilidad de realizar una autopsia. Posteriormente, Jorge Luis Lucero, médico miembro de la Dirección de Hospitales, informó que la muerte del bebé "fue intrauterina".
"La familia no reclamó el cuerpo para hacer un velatorio", indicó Lucero. "Se le ofreció hacer el proceso normal, que es la verificación de los causales de muerte, pero no quisieron. El último control de la señora fue en el mes de febrero en una clínica privada", indicó Lucero. El médico afirmó que "el procedimiento de velarlo no tiene nada que ver con el procedimiento legal" y agregó que "en la historia clínica, la mamá firmó con la abuela que no quería hacerle ningún estudio más a su hijo". "A partir de ahí se esperó un plazo de 72 horas, para reclamar el cuerpo, pero como no vinieron, lo cremaron", puntualizó.
La familia de Belén Orellana radicó una denuncia en la comisaría de Moreno y por ese motivo se lleva a cabo una investigación interna, con el fin de desligarse o asumir responsabilidades de todo el personal que intervino con la paciente. Mientras tanto su abogado, Hugo Tríndade, cuestionó "¿Cómo van a cremar un bebé en 48 horas cuando los padres la están pidiendo? La madre estaba internada y no había ningún apuro". "Me dijeron que tenía hace un mes a la beba muerta en su vientre. Esto es un disparate porque si no la mamá tendría gangrena". El letrado remarcó, además, que "como lo cremaron no hay ninguna posibilidad de obtener el ADN de la beba para constatar que sea ella".