El sobrino del papa Francisco continúa luchando por su vida, luego de perder a su mujer y a sus dos hijos en la madrugada del martes, cuando su auto chocó contra la parte trasera de un camión en la autopista Rosario-Córdoba, a la altura de la localidad de James Craik, Córdoba. Ocurrió cuando regresaban de una salida por el fin de semana largo.
Según el último parte médico difundido ayer, al cierre de esta edición, Emanuel Bergoglio “continúa sedado, asistido por un respirador mecánico, en coma farmacológico, y pese a su estado crítico, evoluciona favorablemente”.
Según Luchemos por la Vida, 22 personas por día mueren en accidentes viales. En este caso se trata de una familia completa rodeada de tragedia. De tres vidas que se detienen y una que lucha por seguir adelante. Pero, estadísticamente, el caso refuerza una tendencia. Especialistas consultados por PERFIL explican que los fallecidos a causa de accidentes de tránsito durante los sábados, domingos y feriados representan el 38% del total de víctimas fatales registradas durante toda la semana (ver aparte).
El siniestro que involucra a Bergoglio aún no fue esclarecido, y las pericias continúan su curso. Emanuel, de 38 años, embistió con su Chevrolet Spin un camión cargado con maíz que circulaba en el mismo sentido. A causa del impacto murieron su esposa, Valeria Carmona, de 38 años, y sus dos hijos: José, de 8 meses, que se encontraba en brazos de su madre, y Antonio, de 2 años, que falleció mientras los médicos lo asistían.
Emanuel es hijo de Alberto Bergoglio, hermano fallecido del sumo pontífice. La trascendencia que tomó la noticia motivó a los seguidores del ex cardenal a expresar su apoyo mediante las redes sociales. “Desde mi anonimato le mando el abrazo más grande en este momento para usted y toda su familia”, escribe Patricia Belmonte en el muro del Papa. También Elena Orlando deja su mensaje en la cuenta de María Bergoglio, hermana del Papa: “(...) Aún cuando comparto tu dolor, y el de toda tu hermosa familia, me consuela saber que ya tienes tres ángeles en el cielo. Sigo en oración desde el primer momento que me enteré de tan triste accidente (...)”.
Pesar. “La partida de los bebés y Vale no la podemos asimilar aún. Me duele mucho lo que le pasó. Es como parte de mi familia”, dice Sebastián Colombo, amigo íntimo de la pareja. A su vez, José Ignacio Bergoglio, hijo de María, la hermana del Papa, agradeció los mensajes de apoyo en Facebook. “Emanuel sigue peleando, hay que esperar y rezar”, dijo a PERFIL.
La fatalidad interrumpió la vida de una familia que volvía de visitar a un pariente. Valeria Carmona era trabajadora social, y su familia está radicada en Catamarca. El propio papa Francisco habló de ella en el final de la Catequesis del miércoles 20, día en el que se despidieron de sus restos. “Perteneció a la parroquia del Patriarca San José, en San Miguel. Para los que la conocimos y queremos, es una mujer de corazón grande, que sufría y se ocupaba de los otros. De sonrisa amplia y buena. Buena hija, hermana generosa, amiga fiel. Formaba con Emanuel y sus dos hijitos una familia hermosa”, sostuvo.
Pese al dolor, los amigos y allegados se mantienen unidos para darle fuerzas a Emanuel, que ya fue operado cuatro veces por una grave lesión en el bazo.
En paralelo, la fiscal de Instrucción de Oliva, Mónica Biandrate, quien investiga las causas del siniestro, informó que el camionero involucrado en el choque, identificado como Raúl Pombo, fue imputado como presunto autor de “homicidio culposo agravado por la cantidad de víctimas, pero ello no implica medidas coercitivas sobre su persona, y esta imputación sólo responde a los fines de darle garantías constitucionales”, explicó.
Pombo aseguró a los medios que, luego de sentir “el impacto”, se tiró “a la banquina”. “Paré y vi el auto metido abajo”, aseguró. Ahora sólo resta esperar los resultados del análisis de los peritos para encontrar la causa de la colisión.