Una joven de 21 años denunció que fue asaltada y violada hoy en el barrio porteño de Flores, hacia el que fue trasladada por un taxi que tomó al salir de un boliche de Palermo. Su familia no descarta que haya "recibido de prepo alguna sustancia" que vulneró su voluntad.
La madre de la joven resaltó que su hija salió alrededor de las 8 de hoy de un local bailable ubicado en Niceto Vega 5500. Allí se tomó un taxi hasta Caballito, pero se quedó dormida y se bajó "desorientada" en la avenida Avellaneda. En esa parte del barrio porteño de Flores fue asaltada y violada por tres hombres que estaban armados. La mujer admitió que su hija "sí había tomado algo de alcohol" pero aclaró que "no estaba borracha" cuando dejó el local bailable.
"No descartamos que pueda haber recibido de prepo alguna sustancia", dijo la madre este mediodía a Crónica TV.
Según informaron fuentes policiales a la agencia DyN, poco después de bajar del taxi sobre la avenida Avellaneda la joven fue sorprendida por tres hombres que estaban a bordo de un auto Renault de color blanco, que le robaron sus pertenencias y, uno de ellos, la violó.
Los informantes señalaron que cuando se pudo liberar de los agresores, se dirigió a una estación de servicio cercana donde le pidió a un empleado un teléfono para poder comunicarse con un amigo y pedir ayuda. La joven fue llevada por su amigo a un centro médico para que pudiera ser atendida y realizar la denuncia.
La madre contó que su hija "tomó un taxi a Caballito porque iba a dormir a lo de una amiga" y señaló que la joven le dijo que "estaba desorientada" durante el viaje.
"Sí había tomado algo de alcohol, pero no estaba borracha. Me dijo que se vio en un momento caminando por Avellaneda, no recuerda la altura. Ahí hizo un par de cuadras y la atacan tres jóvenes adultos a punta de pistola y con arma blanca", detalló.
La madre afirmó que la joven "fue sometida" en "ese lugar" y que "ella no sabe explicar por qué", además de que "no" podría reconocer la identidad de los agresores. Además, afirmó que después del ataque "estuvo un rato deambulando porque no terminaba de saber dónde estaba".
Por último, la mujer añadió que no descartaba que su hija "pueda haber recibido de prepo alguna sustancia" que hubiera reducido sus capacidades físicas o mentales.
Desde el sanatorio de Palermo donde fue atendida por el servicio de su obra social, la víctima llamó a la policía que dispuso la intervención de la oficina de Violencia Sexual, un médico legista y el secuestro de ropa interior para realizar los estudios pertinentes, añadieron los informantes.
Intervino en el caso la comisaría 31 y el fiscal de instrucción 10, Julio Roca, que llevan adelante una investigación.