Un banco estatal de inversión de Alemania comprará una participación en uno de los mayores operadores de redes eléctricas del país para impedir que la adquiera una compañía china, aduciendo preocupaciones en materia de seguridad nacional para su intervención.
La empresa estatal KfW adquirirá una participación de 20 por ciento en 50Hertz Transmission GmbH, valuada en unos 770 millones de euros (US$895 millones), a Elia System Operator SA/NV de Bélgica. La Corporación Estatal de la Red Eléctrica de China había mantenido negociaciones para comprar una participación del 20 por ciento antes de que Elia, que será propietaria del 80 por ciento restante de 50Hertz, acordara adquirírsela a un inversor australiano.
El gobierno de la canciller Angela Merkel está al frente de medidas destinadas a implementar una revisión de las inversiones externas que abarque a toda la Unión Europea después de haber sido blanco de adquisiciones chinas en los últimos años. Además de la participación en 50Hertz, otras incursiones chinas notables en empresas de Alemania fueron la compra en 2016 del fabricante de robots Kuka AG por Midea Group Co., y una adquisición frenada por las autoridades estadounidenses del fabricante de equipos de semiconductores Aixtron SE.
“Por razones de seguridad nacional, el gobierno federal tiene un gran interés en proteger la infraestructura energética crítica”, dijo el Ministerio de Economía en un comunicado.
La red de transmisión de 50Hertz abastece de electricidad a unos 18 millones de personas. KfW proyecta tomar esta participación sólo temporalmente. Atraídas por flujos de efectivo estables y el know-how técnico, en los últimos años las compañías de electricidad chinas han comprado operadores de red en el mundo entero.
Normas más estrictas. El gobierno alemán endureció el año pasado las normas para los inversores extranjeros a raíz de que adquisiciones notorias de empresas locales por parte de corporaciones chinas generaron una reacción adversa de la población. El pasado miércoles 25 de julio, el Ministerio de Economía dijo que se proponía reforzar aún más dichas normas -un día después de que un alto funcionario de contrainteligencia de Merkel dijera a los periodistas que las adquisiciones chinas de compañías de alta tecnología en Alemania representan una potencial amenaza para la seguridad nacional-.
En lo que constituiría la primera prohibición directa por parte de Merkel a una adquisición de una compañía alemana por parte de China, el gobierno proyecta vetar la venta de Leifeld Metal Spinning a inversores chinos, informó la revista WirtschaftsWoche este jueves, mencionando fuentes gubernamentales sin identificarlas. Leifeld se especializa en materiales de alta resistencia para la aviación, el espacio y la tecnología nuclear.
Boris Schucht, máximo responsable de 50Hertz, dijo que el gesto del gobierno demuestra hasta qué punto es crucial el operador de redes para la infraestructura de Alemania. “En el futuro, con una nueva estructura de propiedad como parte de un Elia Group fuerte, queremos continuar nuestro camino hacia una transformación energética exitosa en Alemania y Europa”, dijo Schucht en una declaración.