La Comisión Europea decidió no iniciar un procedimiento disciplinario contra Italia con relación a su presupuesto, luego de que el gobierno populista del país se comprometiera a controlar su gasto. Los activos italianos se recuperaron.
Tras una reunión de sus principales funcionarios, la comisión, la rama ejecutivo de la UE, llegó a la conclusión de que las concesiones de Italia en su presupuesto significaban que el país no justificaba aplicar el llamado procedimiento de déficit excesivo, que podría finalmente conducir a sanciones financieras.
"Las intensas negociaciones en las últimas semanas han resultado en una solución para 2019", dijo el miércoles en Bruselas a la prensa el vicepresidente de la Comisión, Valdis Dombrovskis. "Seamos claros, la solución no es la ideal, pero evita abrir el procedimiento de déficit excesivo en esta etapa y corrige la situación de incumplimiento grave".
Italia al borde de la recesión mientras la demanda se contrae
Los rendimientos de los bonos italianos a 10 años cayeron hasta 18 puntos básicos al 2,75 por ciento, el menor nivel en más de tres meses, mientras que el índice de acciones FTSE MIB se recuperó hasta un 1,8 por ciento y las acciones bancarias encabezaron las ganancias.
La decisión se produce luego de semanas de negociaciones entre los funcionarios italianos y de la UE y termina un enfrentamiento de un mes con Bruselas que afectó a los mercados. También representa una retractación para los líderes populistas del país, quienes llegaron al poder con costosas promesas electorales costosas que incluían reducir la edad de jubilación y más beneficios de asistencia social.
Bruselas y Roma hicieron concesiones para alcanzar el acuerdo: los populistas italianos descartaron sus planes de gasto más ambiciosos y mientras que la Comisión ignoró el incumplimiento de Italia de la obligación de reducir su déficit estructural el año próximo, que excluye gastos extraordinarios y los efectos del ciclo económico.
Concesiones presupuestarias
Como parte del acuerdo, Italia redujo su objetivo de déficit para el próximo año al 2,04 por ciento del producto interno bruto y recortó aproximadamente 4.000 millones de euros (US$4.600 millones) de sus planes de gasto. El plan inicial de Roma de un déficit del 2,4 por ciento fue rechazado por las autoridades en Bruselas porque violaba las normas presupuestarias de la UE, aunque el análisis realizado por la comisión el mes pasado sugería que el déficit en realidad se situaría cerca del 3 por ciento.
El plan inicial de Roma de un déficit del 2,4 por ciento fue rechazado por las autoridades en Bruselas porque violaba las normas presupuestarias de la UE
Aunque está lejos de lo que esperaba la UE, el acuerdo es un alivio para los funcionarios de la UE, que durante meses se mostraron preocupados por el posible impacto que podría tener un estancamiento presupuestario prolongado en las finanzas del país y en la economía de la zona del euro.
"La composición de las medidas anunciadas y el presupuesto en general aún son motivo de preocupación", dijo Dombrovskis, quien agregó que Italia necesita urgentemente restablecer la confianza en su economía y poner su deuda en una trayectoria descendente.
Protestas en Francia dan argumentos a Italia para presupuesto
Los debates se complicaron aún más con las medidas adoptadas por el gobierno francés para calmar las protestas de los chalecos amarillos, que probablemente impulsarán el próximo año el déficit presupuestario del país por encima del límite de la UE. La decisión de Francia dio lugar a quejas de Roma respecto de que París recibe un trato especial en lo que respecta a su presupuesto.
