COLUMNISTAS
las razones

Goodbye Alberto

En su video, el Presidente eleva su carácter de víctima de la historia a la máxima expresión.

20230422_alberto_fernandez_bomber_temes_g
‘Solo se trata de vivir’ Alberto Fernández. | Pablo Temes

Luego de una semana complicada y en medio de las PASO de los mercados financieros (que votan apostando contra el peso) Alberto Fernández decidió su propio paso al costado frente a su posible reelección.

En su video de despedida, de unos ocho minutos de duración, el Presidente eleva su carácter de víctima de la historia a su máxima expresión y la vez se proclama árbitro del proceso que se abre al interior del peronismo-kirchnerismo.

Tres razones, tres. Su “renunciamiento histórico” tiene razones exógenas, endógenas y estructurales. Entre las primeras, el fracaso del programa de Martín Guzmán que era el suyo propio que terminó en la cesión del poder real a Sergio Massa en una noche oscura en que los ruidos de los helicópteros se activaron, como reconoció en estos días Jorge Ferraresi.  

Esto no les gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
Hoy más que nunca Suscribite

El modelo guzmaniano, que se puede resumir en ir procrastinando los problemas para que en algún momento el país vuelva a crecer y de esa forma se vaya reduciendo el gasto público en términos reales del PBI ya no funciona en Argentina, ni siquiera con precios récords de las materias primas exportables. También el país soportó, como no lo deja de recordar el presidente cada día la pandemia del Covid-19. Allí la gestión gubernamental fue por lo menos polémica, con las discusiones sobre las restricciones sociales que el propio Presidente incumplió, las ideas y venidas sobre las vacunas y finalmente los privilegios de quienes se vacunaron primero.

(Casi) todos contra Horacio

Entre las cuestiones endógenas, obviamente deben señalarse los múltiples conflictos al interior del Frente de Todos. Aquí el pensamiento racional apunta a las múltiples intervenciones de Cristina Fernández, Máximo Kirchner, Eduardo de Pedro y Andrés Larroque, pero la expresión descarnada de lo que el kirchnerismo duro pensaba lo expuso en unos “audios privados” la exdiputada de la cristinista Unidad Ciudadana Fernanda Vallejos: “okupa”, “mequetrefe” y “atrincherado”, fueron los términos utilizados.

Cámara lenta. Se debe decir que a pesar de todas las ofensivas políticas (muchas veces agraviantes) que sufrió Alberto, la institucionalidad resistió. No obstantes, no pocas veces en estos años albertistas hubo que revisar la ley de Acefalía Presidencial crucialmente modificada en 2002. Un tema crítico es que la primera sucesora en caso de ausencia del presidente es la misma Cristina.

Entre las razones estructurales, se deben mencionar las propias limitaciones de Alberto Fernández que no pudo, supo o quiso construir en su mejores momentos (al inicio de la pandemia) una fuerza política propia (el famoso partido del Estado) capaz de rivalizar con el kirchnerismo, como sí lo hiciera Néstor Kirchner con el duhaldismo. Lejos de eso, la expresión “albertismo” se transformó en una suerte de meme político sin dimensión ni volumen. Ese volumen, precisamente se fue adelgazando con las sucesivas renuncias en su gabinete original, Guzmán, Moroni, Losardo, Kulfas, Solá, Béliz, González García, Frederic, Gómez Alcorta, entre otros abandonaron el frágil barco presidencial. Por ahora, en el final del listado de los renunciados se encuentra el curioso Jefe de Asesores Antonio Aracre que por su plan económico alternativo casi hace caer al gobierno entero.

En menos de un mes se cumple el cuarto aniversario del mensaje por redes sociales de Cristina Kirchner anunciando que había seleccionado a Alberto Fernández para encabezar la fórmula presidencial. En esos días el gobierno de Mauricio Macri se iba desorganizando con rapidez, producto del malestar social y la retirada de los fondos de inversión que querían “repatriar” sus dólares. En aquel mismo tuit Cristina se bajaba un peldaño en Ejecutivo para ir Vice.  Los sucesos que fueron desde mayo a agosto de 2019 parecen estar reproduciéndose en estos días, pero a pesar de todas las opiniones Alberto no ha sido un títere, pero tampoco un líder.

Mejor tarde que nunca. Ahora se abre un escenario para generar una competencia adentro del Frente de Todos que permita reconvocar a los votantes de 2019, muchos de los cuales dieron un portazo dos años más tarde. No se puede dejar de observar que hay una homología de quienes peor la han pasado con las altas tasas de inflación en estos años y el electorado peronista, lo cual tiene un solo impacto nacional, sino que llega a cada región del país, como lo saben los gobernadores e intendentes que enfrentan inéditas amenazas electorales.

Teorías conspirativas

En un rincón aparece la figura de Sergio Massa que se queda en soledad para enfrentar la corrida cambiaria, las demandas del FMI y la idea que instaló el paper de Aracre que se debe devaluar la moneda al menos un 60%. Si finalmente decide sumarse a la contienda no sería raro que busque ser acompañado por Eduardo Wado de Pedro o alguna otra figura joven del kirchnerismo. En el otro rincón emerge el renacido Daniel Scioli, que de la mano de alguna figura del mundo de los gobernadores pretende concluir en mejores condiciones la campaña de 2015.

Hoy ejercer la posibilidad de tener dos o más candidaturas es imperativo para el Frente de Todos. De forzar una candidatura única, como siempre prefirió Cristina Kirchner el peronismo se expondría al abismo de salir tercero en las elecciones. Ya no se puede fingir demencia pensando que el fenómeno Milei afecta al antiguo electorado de Cambiemos. Por el contrario, hoy La Libertad Avanza ha capturado al Partido de la Bronca que se fue al kilómetro 501 en 2002 para no tener que ir a votar.

Sin embargo, no se puede evitar observar que la economía argentina se encuentra bajo un riesgo sistémico de crisis que debe ser anotada por todo el arco político que cree que la democracia como sistema está por encima de las apetencias personales. La situación amerita, si no un cogobierno, evitar los planteos pírricos que pueden llevar una situación imposible que ponga a la Argentina en la portada de todos los medios del mundo.

*Sociólogo (@cfdeangelis).