La línea de créditos MiPymes es otra de las herramientas que definió el gobierno Nacional cuando arrancó la pandemia de Covid-19 para apoyar a las empresas en un momento de brusca caída de la actividad económica.
A fines de junio pasado el BCRA aclaró en una comunicación que "los créditos subsidiados para el pago de sueldos destinados a pequeñas y medianas empresas, con una tasa de 24% y garantía estatal que forman parte de la línea MiPymes y que comenzaron a otorgarse en abril pasado, disponen de una prórroga de vencimientos de deudas bancarias hasta el 30 de septiembre".
La línea contempla créditos para pago de salarios o compras de bienes de capital con tasas al 24%, que están vigentes hasta el 31 de agosto. Como herramienta adicional, el gobierno destinó 30 mil millones de pesos al Fondo de Garantías Argentino (FOGAR) para otorgar garantías de respaldo a las pymes que carecían de ella (Linea MiPYME PLUS).
De todos modos, las cámaras empresarias siempre manifestaron malestar ante la dificultad de las empresas para acceder a esta línea de créditos, en parte porque los bancos seguían exigiendo carpetas de crédito difíciles de cumplir para las empresas en plena pandemia.
Aunque también vale aclarar que el BCRA había manifestado oportunamente la obligatoriedad de todos los bancos de ofrecer la línea.
Ahora bien, según datos aportados por el Banco Central, "al 21 de julio, la línea MiPyMEs acumuló desembolsos por $317.390 millones, incluyendo unos $7.800 millones a prestadoras de servicios de salud. Por su parte, la línea MiPyME Plus (que es la que tiene garantía del Fogar) sumó 1.750 millones aprobados; al tiempo que la línea a tasa 0 de créditos para monotributistas y autónomos otorgó créditos por 55.167 millones", dijeron.
"Las tres líneas de crédito MiPymes, MiPymes Plus y Créditos tasa 0% para monotributista entregaron unos 375.000 millones al 21 de julio" BCRA,
La noticia es muy bien recibida por las empresas que han contraído esta línea de créditos porque la salida de la pandemia viene más lenta que lo esperado para la recuperación económica. Y cualquier plazo de extensión es primordial para mantener el empleo y el negocio abierto, en muchos casos.
Entre otras cosas la prórroga significa que quien tomó estos créditos, tendrá la posibilidad de comenzar a pagar la primera cuota recién a partir de octubre. La normativa del BCRA no les permitirá a los bancos cobrar intereses punitorios por los atrasos. Además, las cuotas impagas deberán abonarse en los meses siguientes a la finalización del crédito.
Inicialmente estos créditos comenzaban a repagarse a los 90 días de otorgados, lo que ponía a algunas empresas en la situación de tener que empezar a pagar en el contexto actual, donde son todavía muchas las que no logran estabilizar sus facturaciones.
Con el cambio propiciado por el BCRA, las empresas, en lugar de desembolsar la primera cuota en agosto, podrán hacerlo a partir de octubre.
LR