Con Castro al teléfono, Chávez cerró la otra Cumbre
Ante unas cinco mil personas, el mandatario venezolano encabezó el acto de
clausura del encuentro paralelo a la
XVII Cumbre Iberoamericana. Allí recibió el llamado de líder cubano y la ovación
del público.
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AFP
Santiago de Chile – El líder cubano Fidel Castro y el presidente venezolano, Hugo Chávez, hablaron hoy por teléfono ante unas 5 mil personas en la clausura de la Cumbre de los Pueblos, paralela a la XVII Cumbre Iberoamericana que reunió desde el jueves a representantes de 22 países de la región en Chile.
El diálogo entre el mandatario venezolano y el líder cubano, que delegó el poder por enfermedad hace 18 meses, se produjo luego de que Chávez comentara que “Fidel es de otro mundo”, pero no pudo ser emitido para que lo escucharan todos los presentes.
Horas antes, Chávez incluso había dicho en público que Castro era como su padre. El mandatario venezolano recibió la llamada en el teléfono del vicepresidente cubano, Carlos Lage, presente en el acto realizado en el Velódromo del Estadio Nacional de Santiago.
Tras sostener el diálogo, Chávez comentó ante una multitud enfervorizada que Fidel le dijo “ que sí es de este mundo y que yo también, que las ideas son infinitas, son eternas”. Chávez agregó que Fidel también recordó a los combatientes chilenos que murieron luchando contra el dictador Anastasio Somoza en Nicaragua, durante la Revolución Sandinista de 1979, que lideró el hoy presidente nicaragüense Daniel Ortega, también presente en la ceremonia.
“Fidel rinde tributo a la memoria de estos internacionalistas heroicos, y Fidel rinde tributo a todos los combatientes chilenos que murieron luchando contra la tiranía, están unidos ellos en la memoria, todos los que cayeron, de los pueblos y en la gloria de los pueblos", vociferó en el cierre de la reunión paralela. Chávez además lamentó no haber podido sacar la voz de Fidel al aire, "porque la gente quería oírte".
La Cumbre de los Pueblos pidió a los gobernantes de la región continuar la recuperación de los recursos naturales y apoyar la integración energética, además de la libre movilidad de los migrantes. Las peticiones, contenidas en el llamado Manifiesto de Santiago, también plantearon que la integración económica ponga acento en las "economías solidarias".
Asimismo, el Manifiesto enfatizó la necesidad que "la lucha democrática fortalezca los procesos constituyentes y la creación de una nueva institucionalidad" en la región. Los propuestas, debatidas por indígenas, campesinos y estudiantes y académicos, fueron entregadas hoy en un acto público al que asistieron 5 mil personas. A la ceremonia también asistieron los presidentes de Venezuela, Hugo Chávez, Ecuador, Rafael Correa, Bolivia, Evo Morales, Nicaragua, Daniel Ortega, además del vicepresidente cubano, Carlos Lage.
