Carlos Fara, consultor político, escribió una nota en la que analizó la permanencia del movimiento peronista 50 años después. “En la fase de Néstor y Cristina Kirchner el peronismo se convirtió un poco más en un movimiento de izquierda popular”, resaltó en Modo Fontevecchia, por Net TV y Radio Perfil (FM 101.9).
Me decía un amigo que opinaba que para ganar la interna había que ser kirchnerista, para ganar las generales peronista y para ganar el balotaje alfonsinista. ¿Qué opina de esta ocurrencia? ¿Quién creés que podría ser el mejor candidato del peronismo para las PASO, luego para las primarias y finalmente para el balotaje?
Efectivamente, creo que para el voto duro el mejor candidato sería Wado, por ser el candidato de Cristina Kirchner. Obviamente, Cristina sigue siendo líder del espacio, aún desgastada, luego de esta experiencia muy negativa para la opinión pública que resultó el experimento de Alberto Fernández.
En teoría, Scioli debería poder concitar un público más en los bordes, menos politizado e ideologizado, para una primaria. Fue bastante competitivo en 2015 en primera y segunda vuelta, perdió apenas por 700.000 votos. El interrogante que se abre es si este Scioli, ocho años después, sigue guardando ese handicap, esa capacidad de poder convocar público independiente.
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¿Tu pronóstico es que Wado de Pedro gana la interna de Unión por la Patria?
Yo creo que sí. Obviamente, va a haber un desequilibrio de estructuras fuerte. El segundo factor es el aval de Cristina, que aunque ya no pueda aportar mucho fuera del núcleo duro, dentro sigue siendo una figura fuerte, como también lo es Macri dentro de Juntos por el Cambio.
Me parece que Scioli, que es una figura que ha sido por lo general orgánica a los espacios donde estuvo, si se pudiera sumar a la campaña de Wado de Pedro podría llegar a generarle un cierto valor agregado.
Alejandro Gomel (AG): ¿Por qué creés que Wado fue el candidato en esta elección y no alguien que podría haber sido más competitivo, como Kicillof o Sergio Massa?
Primero, hay que tener en cuenta que esta es una elección en la que, lo más probable es que Unidos por la Patria pierda, no es una elección para ganar. Con lo cual, se empiezan a sacar otro tipo de cálculos, y ahí los elementos de la política, pensando después del mes de diciembre, tienen un rol bastante fundamental.
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Yo creo que a Cristina le gustaba la idea de Massa candidato, pero Sergio Massa no aceptaba competir en una interna, y menos con Scioli, por sus diferencias personales.
Creo que la candidatura de Kicillof era, sobre todo, una gran presión de Máximo Kirchner, y me parece que, de alguna manera, Cristina jugó tratando de ser salomónica, poniendo de candidato a presidente a alguien que es indiscutiblemente una persona encolumnada con ella, que representa esta continuidad del relato a partir de eso de “la generación diezmada”, y que baja 25 años la edad en comparación con otros dirigentes, incluso de Scioli.
Además, en la medida en que Kicillof se queda en la provincia de Buenos Aires, es la figura más competitiva del oficialismo ahí. Habrán pensado, “no vaya a ser que lo saquemos de donde rinde mejor y después tengamos un dolor de cabeza en Buenos Aires, preguntándonos a posteriori por qué no lo dejamos”.
La segunda cuestión es quizás el mensaje de que La Cámpora se lleva el candidato a presidente, pero no se lleva la Provincia. Quizás ese es un poco el juego de equilibrios que Cristina pudo haber contemplado en el armado.
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Sin lugar a dudas. Inclusive, con un detalle adicional, que por ahora solamente es un rumor, pero tiene bastante sentido, que es la posibilidad de que Massa sea candidato a senador nacional por la provincia de Buenos Aires. Aunque pierda, de todas maneras va a ser senador.
Todas las piezas van a estar, de alguna manera, presentes en el cuadro político futuro, a disposición de moverlas cuando sea necesario.
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En tu columna para el diario Perfil, respecto de los 50 años del regreso de Perón a la Argentina, escribiste: “Perón se inscribe en una lista de varios líderes de movimientos políticos de base Popular en América Latina del siglo XX Haya de la Torre en Perú, Cárdenas en México, Vargas en Brasil, Velasco Ibarra en Ecuador, Paz Estenssoro en Bolivia. Sin embargo, todos ellos han quedado en el olvido en los libros de historia, mientras que el proyecto de Perón sigue vigente, más allá de los desgastes estructurales y lógicos".
Asumiendo que la candidatura de Wado de Pedro, como vos decís, es para perder y posicionarse para 2027, ¿corre riesgo el peronismo de que le pase lo mismo que a Haya de la Torre, Vargas o Paz Estenssoro?
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Sin duda que corre riesgo. Primero porque me parece que en la fase de Néstor y Cristina el peronismo se convirtió un poco más en un movimiento de izquierda popular y no tanto en aquel movimiento que podía ir hacia derecha o izquierda según la coyuntura histórica.
Esto me parece que le ha hecho perder flexibilidad, más allá de que en los últimos 20 años el kirchnerismo gobernó la mayor parte del tiempo, cuatro presidencias. Pareciera ser un movimiento más exitoso en la conservación del poder que, al final del camino, en su relación con la opinión pública.
De las últimas cinco elecciones, el kirchnerismo solo ganó la de 2019. Es probable que, al terminar este año, sobre seis haya perdido cinco elecciones.
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Eso claramente te presenta muchos interrogantes sobre la perdurabilidad estructural del peronismo, sobre todo porque tampoco hay alternativas de proyectos internos con ganas de discutirle el predominio a Cristina. El único que había hecho eso era Massa, pero volvió al redil y, por ahora, no parece que tenga intención de cambiar esa situación.
Desde el punto de vista teórico, solamente a través de contrafáctico podemos hacer análisis. Recuerdo que Carlos Corach, un teórico bastante agudo, decía que si Perón reviviese se asombraría de la longevidad de su partido, por lo mismo que vos mencionaste que le pasó a todos los integrantes de los movimientos populares latinoamericanos del siglo XX.
Mi pregunta es, siguiendo esa idea hipotética, Perón vuelve a la vida y se encuentra que en su movimiento los dos candidatos son Daniel Scioli y Wado de Pedro, ¿por quién creés que votaría?
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Probablemente, Juan Domingo Perón votaría por Daniel Scioli.
No precisamente porque lo considere un líder peronista clásico, sino porque Perón era un gran lector de los vaivenes de los tiempos históricos. Efectivamente, te diría que, en ese sentido, veo a Scioli con mucha más flexibilidad de adaptación. Como mostró el propio Perón a partir de las distintas etapas de su vida.
En ese sentido, Perón, que era un gran conservador, vería con cierto fastidio que el movimiento esté copado por el ala izquierda.
Las fórmulas en Juntos por el Cambio
Claudio Mardones (CM): Se está por confirmar la fórmula Larreta-Morales. Durante el programa decíamos que Gerardo Morales llega a la fórmula luego de los incidentes en Jujuy y la represión.
Algunos consideran que eso lo fortalece y otros que va a ser un lastre para la campaña en la medida en que se comience a conocer un poco más lo que ha sucedido en la provincia. ¿Qué opina usted?
Creo que llega fortalecido. Estamos en medio de una discusión, sobre todo para el público de Juntos por el Cambio, de quién pone orden en la Argentina. Morales, en esa coyuntura, sale fortalecido, eso sin duda.
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Luego, cuando uno arma políticamente, junta dirigentes. Los dirigentes no significan directamente votos, pero es un detalle importante. La radiografía del radicalismo nacional está más encolumnada con Morales que con los radicales que van con los halcones del PRO.
Me parece que además, en esta coyuntura, es particularmente importante la presencia de Morales, porque un Larreta sospechado de tibio ficha a dos figuras relevantes. Morales, después de la crisis jujeña, y Pichetto, que es otro duro, que en teoría debería haber estado más cerca de Patricia Bullrich. Ahí están también los interrogantes sobre cómo Bullrich su estructura.
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CM: Teniendo en cuenta que eligió como compañero de fórmula a Luis Petri, que dentro del radicalismo es considerado inorgánico y tiene un bajo nivel de conocimiento a nivel nacional, ¿cree que queda más debilitada Bullrich en este contexto o todo queda más atado a la figura de Bullrich y lo de Petri pasa a un segundo plano?
Creo más en esta segunda hipótesis. No creo que Patricia Bullrich pierda nada por haber sumado a Petri a la fórmula, pero sí es absolutamente cierto que no es una figura nacional como lo es Morales. Tampoco es una figura ganadora, perdió una primaria hace pocos días con Cornejo.
Es una figura que es más de lo mismo junto a Bullrich, no le aporta otro ángulo. Es una figura que en algún momento Cornejo lo puso de diputado nacional y se lo vendió a Macri como que le estaba pagando al PRO, en ese nivel estaba.
Además, Mendoza ya era una provincia proclive a Bullrich, de manera que poner una figura de Mendoza no le agrega mucho. Me parece que ella lo que quiso es marcar que lo importante era ella y que lo del vice es simplemente un complemento.
FM JL
