Un problema para Joe Biden: imputaron a su hijo Hunter por la posesión ilegal de un arma de fuego
El fiscal federal de Delaware le imputó tres cargos por compra y posesión de armas, algo ilegal cuando se trata de una persona con adicciones.
Imputaron al hijo de Joe Biden por posesión ilegal de armas de fuego |
Télam
Hunter Biden, hijo del presidente estadounidenseJoe Biden, enfrenta tres cargos vinculados con la compra y tenencia ilegal de armas, una práctica prohibida cuando se trata de individuos con problemas de adicción. Los problemas legales de Hunter, de 53 años y abogado con formación en Yale, opacan la campaña de reelección de su padre, quien se encuentra en una contienda principal con el expresidente republicano Donald Trump.
De acuerdo con la acusación presentada, en torno al 12 de octubre de 2018, Hunter Biden adquirió una pistola, una Colt Cobra calibre 38. Durante la transacción, presuntamente proporcionó información falsa al vendedor al entregar un certificado en el que afirmaba no ser consumidor ilegal ni adicto a estimulantes, estupefacientes u otras sustancias controladas.
"Sabía que esa declaración era falsa y ficticia", apunta el documento. Además, censura al hijo del presidente por proporcionar información incorrecta sobre sus adicciones en el registro federal de armas de fuego.
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El tercer cargo presentado contra Hunter Biden implica la posesión de un arma de fuego, a pesar de ser consciente de que esto era ilegal debido a sus adicciones. El certificado de compra de armas requiere que el comprador responda si es "usuario ilegal de, o adicto a la marihuana o cualquier depresivo, estimulante, narcótico o cualquier otra sustancia controlada".
Se advierte también que "el uso o posesión de marihuana sigue siendo ilegal bajo la ley federal, independientemente de si se ha legalizado o despenalizado con fines médicos o de recreo en el estado" en el que esa persona resida. Este registro de la transacción subraya que la información proporcionada se empleará para determinar si la ley federal o estatal prohíbe a la persona en cuestión recibir un arma de fuego o si impide su venta o disposición.
El Departamento de Justicia emitió un comunicado en el que señala que, en el caso de una condena por los tres cargos, Hunter Biden podría enfrentar una pena máxima de 25 años de prisión. El comunicado también aclara que las sentencias en casos de delitos federales generalmente tienden a ser inferiores a la pena máxima estipulada.
A cargo de la investigación se encontraba David Weiss, quien ejerce como fiscal federal de Delaware y fue designado como fiscal general interino del caso por el secretario de Justicia de Estados Unidos, Merrick Garland, a mediados de agosto. Hunter Biden está programado para comparecer ante el tribunal para la lectura formal de los cargos, aunque hasta el momento, no se estableció una fecha específica, según informó la CNN.
El acuerdo que no fue
La imputación se produce dos meses después de que se llegara a un acuerdo con la justicia en relación con los cargos relacionados con la posesión de armas y otros delitos fiscales. Este acuerdo se rompió debido a la posibilidad de que el hijo del presidente pudiera enfrentar acusaciones adicionales.
Hunter Biden había aceptado su culpabilidad de los dos cargos menores sobre asuntos fiscales.
Como parte de ese acuerdo, Hunter fue liberado bajo libertad condicional después de demostrar que había saldado sus deudas fiscales pendientes y cumplido con las multas correspondientes, según informó la agencia de noticias AFP.
Dentro del mismo arreglo, Weiss había aceptado levantar el cargo vinculado a la posesión del arma si Biden aceptaba ir a rehabilitación.
