La Asociación Trabajadores del Estado (ATE) de la provincia de Buenos Aires reveló que el pasado 30 de diciembre empleados civiles de la Auditoría General de Asuntos Internos del Ministerio de Seguridad fueron cesanteados por sendos decretos del ministro Carlos Stornelli. El gremio aseguró que estos desplazamientos podrían paralizar la investigación de decenas de expedientes en los que se investiga a policías de la Policía Bonaerense.
"Se trata de abogados altamente capacitados para esa función y con más de diez años de antigüedad, que tenían a su cargo al menos 200 expedientes en los que se investigaban irregularidades cometidas por efectivos de la Policía Bonaerense", indicó el gremio en un comunicado de prensa.
El secretario de Organización de ATE, Julio Ortellado, dijo que "resulta extraño que se despida a los trabajadores que investigaban a policías" como el "efectivo policial que ya fuera desafectado de la fuerza y que se encuentra involucrado en el robo de expedientes en la Secretaría de Derechos Humanos de la provincia".
El dirigente denunció que "se está produciendo un vaciamiento del área de Asuntos Internos, ya que con el despido de los trabajadores civiles sólo quedarán policías para proceder a la investigación del resto de los integrantes de la fuerza de seguridad".
Y agregó que "es alarmante que mientras policías bonaerenses aparecen vinculados a los crímenes de mayor repercusión pública, el ministro toma una medida que puede garantizarle impunidad a actos de corrupción, los mismos que denunciara semanas atrás".
Carlos Leavi, otro de sus dirigentes, señaló que "desde ATE exigimos al gobernador y al ministro de Seguridad la inmediata reincorporación de los trabajadores y reclamamos la intervención del ministro de Trabajo, Oscar Cuartango".
Los trabajadores de Asuntos Internos venían llevando adelante un reclamo gremial por el pase a planta permanente sin pérdida salarial, "tema que había sido tratado en paritarias y que los funcionarios del ministerio se habían comprometido a conformar una mesa técnica para abordar el planteo de los trabajadores nucleados en ATE".
"De allí que los despidos suponen, además de una arbitrariedad, un acto de mala fe y de incumplimiento de los acuerdos paritarios, cuando no de persecución sindical", se subrayó. Agregó ATE que "además los despidos se produjeron en condiciones humillantes, ya que los trabajadores fueron obligados a abandonar su lugar de tareas de manera compulsiva por orden de la responsable del área, María Alejandra Provítola".
Fuente: DYN