El Gobierno avanzará en controles más estrictos en las fronteras y, a la vez, comenzó a enviar información a todas las provincias sobre las personas que deben estar en cuarentena por haber llegado al país desde uno de los países en zona de riesgo por el coronavirus. Además, ayer a última hora se publicó en el Boletín Oficial una resolución que le prohibe el ingreso al país por 30 días a extranjeros que hayan en las zonas afectadas en los últimos 14 días.
En cuanto a las fronteras, el Gobierno pretende “extremar los protocolos”, según explicaron fuentes oficiales a PERFIL. Eso supone un refuerzo de personal de las fuerzas federales –que incluso deberán ser autoridades de control sanitario en aquellas fronteras donde no haya personal vinculado al área de salud–, envío de personal administrativo para controlar las declaraciones juradas (donde debe figurar dónde estuvo cada persona en los últimos 14 días), colaboración de médicos de las fuerzas de seguridad en Ezeiza y otros aeropuertos, y coordinación con los gobernadores que tienen bajo su órbita los más de 150 pasos fronterizos.
El ministro de Salud, Ginés González García, adelantó que habrá “mucho más freno al ingreso de extranjeros”. En el Gobierno explicaron que “el problema no es la nacionalidad, el problema es dónde estuvieron los últimos 15 días o si tienen síntomas cuando ingresan al país”, advirtieron.
Sobre la posibilidad de cerrar fronteras, se descartó de plano. Incluso se pensó en la idea de cerrar algunos pasos fronterizos pequeños donde hay una infraestructura mínima, para reforzar los más grandes. Pero quedó descartado: los propios gobernadores les explicaron a los funcionarios nacionales que se opusieron y rápidamente se concluyó que no era conveniente esa medida extrema.
Eso sí: la ministra de Seguridad, Sabina Frederic, emitió una orden interna a las fuerzas federales apostadas en los pasos fronterizos para que, en el caso de que no haya personal del área de salud, se transformen en agentes de control sanitario para evitar ingresos de personas con síntomas.
En este sentido, el viernes el ministro del Interior, Eduardo “Wado” De Pedro, y su par de Seguridad, decidieron reforzar el control fronterizo, en especial el de los dos pasos internacionales claves: el de Iguazú, y el de Mendoza. Ese día, de hecho, viajaron a Iguazú para monitorear el trabajo de Migraciones y de las fuerzas de seguridad.
En cuanto a la información a las provincias, De Pedro explicó que la idea es que “se cumpla” el decreto de necesidad y urgencia que firmó el presidente y que obliga a permanecer 14 días en cuarentena, aunque no haya síntomas del virus. El titular de la cartera del Interior agregó que, además, Migraciones avanzó con “inspecciones de oficio para constatar que los extranjeros procedentes de los destinos mencionados estén cumpliendo la cuarentena”. Esto supone operativos en hoteles y aparts, así como la posibilidad de detener a quienes incumplan el DNU.
