Los padres del niño que fue sometido a un trasplante de corazón hace una semana en el Hospital Juan P. Garrahan afirmaron hoy que el órgano "está funcionando perfectamente", aunque manifestaron que "hay que esperar, porque fue una operación compleja".
La madre del niño, Belén Ramos, dijo en declaraciones a la prensa que los médicos "pidieron que seamos cautelosos, aunque el cuerpo de Renzo está respondiendo como se esperaba".
"Esperan pasar esta noche y después le empezarán a sacar de a poco las drogas", sostuvo la mujer, y manifestó que "hay que esperar porque fue una operación compleja".
La madre del niño expresó que "los médicos están esperando ver cómo pasa la noche. Su corazón está trabajando 100 por ciento. El corazón funciona bien", y manifestó que el niño "está sin asistencia mecánica".
"El corazón funciona desde ayer a la tarde", afirmó, mientras el padre del niño, Haroldo Antonelli, dijo que el órgano está respondiendo "perfectamente".
La abuela del niño, Patricia Leguiza, dijo esta mañana a la prensa que "no fue un rechazo de Renzo al órgano, pero el corazón no cubre las necesidades que tiene él, el corazón no alcanza, está trabajando a un 50 por ciento. Renzo hoy es una Ferrari y ese corazón es un Fiat 600".