El paso por el Congreso del memorándum de entendimiento que firmaron la Argentina e Irán en el marco de la investigación por el atentado a la AMIA promete ser espinoso para el kirchnerismo, aunque se prevé que finalmente tendrá los votos necesarios para conseguir su aprobación.
La oposición abroquelada, sumada a las presiones que ejercerá la dirigencia judía –con la excepción de un grupo de familiares de las víctimas–, transformará los salones del Congreso en una caja de resonancia de las críticas al proyecto. Sin embargo, desde el oficialismo confían en que la presencia del canciller Héctor Timerman en el debate, sumado a la amplia mayoría que tiene en ambas cámaras, le permitirá salir airoso del trance.
El debate se iniciará el próximo miércoles en el Senado, día en el cual el kirchnerismo pretende sacar dictamen para conseguir su aprobación en el recinto una semana después. Para el jueves, diversos sectores de la oposición están convocando a una asamblea pública en rechazo al acuerdo (ver página 5). Y mientras tanto, desde la DAIA (Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas), brazo político de la comunidad judía, lanzaron un proyecto de ley con el que buscan “correr por izquierda” al oficialismo y que se instale como una alternativa viable al acuerdo con Irán (ver página 4).
Trámite. Ayer se publicó en el Boletín Oficial el decreto 174/13 a través del cual la Presidenta convoca a sesiones extraordinarias en el Congreso, con el único objetivo de aprobar el memorándum con Irán, paso con el que se le dará estatus de tratado internacional.
El proyecto, que consta de sólo dos artículos (uno que aprueba el memorándum y otro de forma), comenzará a ser debatido el miércoles, a partir de las 11, en un plenario de las comisiones de Relaciones Exteriores, Asuntos Constitucionales y Justicia. Las tres están presididas por kirchneristas, Daniel Filmus, Marcelo Fuentes y Pedro Guastavino, respectivamente.
Desde el Senado, ya cursaron invitaciones para participar del debate a las conducciones de AMIA y DAIA y a familiares de las víctimas del atentado, que el 18 de julio de 1994 dejó como saldo 85 muertos.
“Iremos con la lógica de esgrimir argumentos de que el memorándum no da las garantías para lograr el objetivo que se propone en el espíritu de la propuesta”, explicaron desde la conducción de DAIA. Junto a la AMIA, intentarán revertir el escenario alentador que se le presenta al kirchnerismo. Por si el propio peso del rechazo de la comunidad judía no llegara a ser suficiente, ya hicieron público un proyecto de ley por el que buscan modificar el Código Penal para que los delitos de lesa humanidad puedan ser juzgados en rebeldía. Consideran que sería una alternativa difícil de rechazar por parte del oficialismo.