Desde Cordoba
Macri obtuvo un triunfo contundente en Córdoba con el 53% de los votos, seguido de lejos por el candidato de Massa, con el 20 %; el tercer lugar fue para el candidato del Frente para la Victoria, Scioli, quien obtuvo el 18 por ciento.
La holgada diferencia se cimentó en la Capital provincial donde Cambiemos le propinó una verdadera “paliza” electoral a sus contrincantes, al obtener más del 60 % de los votos frente al exiguo 16 % obtenido por Scioli y los 15 puntos de Massa; brecha mucho más abultada que las registradas en las elecciones primarias pasadas.
De esta manera Córdoba se mantuvo como una provincia históricamente esquiva al kirchnerismo quien sólo pudo crecer tres puntos porcentuales respecto a lo obtenido en las primarias de agosto pasado. Cambiemos se impuso de manera predominante en el interior provincial en un amplio espectro de localidades, entre ellas, Villa Nueva, ciudad natal de Carlos Zaninni.
Macri realizó una fuerte apuesta por Córdoba, provincia que visitó en reiteradas oportunidades y que eligió para su cierre de campaña transformándose en el único candidato en realizarlo fuera de la Capital. El gigantesco Orfeo Superdomo fue el lugar escogido por Cambiemos donde asistieron los principales referentes de la coalición. El gran misterio en la provincia era determinar donde irían los votos obtenidos por José Manuel de la Sota que habían quedado vacantes tras las PASO. Con los resultados puestos, quedó claro que el gobernador cordobés no logró trasladar todo su capital político a su compañero Sergio Massa: UNA perdió casi 20 puntos porcentuales desde las PASO a las elecciones de ayer.
El actual ministro de Comunicación cordobés, Jorge Lawson, fue uno de los primeros en reconocer esta situación: “Gran parte del voto de De la Sota ha ido a Macri”.
En la sede de UNA en Córdoba el panorama fue muy desalentador y apenas pasadas las 22.00, cuando aún no había ningún dato oficial, cerraron las puertas del lugar y pidieron a la prensa que se retire. Nadie habló, no llegaron los principales referentes y las luces del local partidario se apagaron antes de lo previsto. Algo similar sucedió en la sede del FPV cordobés.
En Córdoba, además de presidente, se eligieron nueve diputados nacionales que se repartieron de la siguiente formanera: cinco para Cambiemos, dos para UNA y dos para el Frente para la Victoria. Los cordobeses ponían en juego tres bancas para senadores, de las cuales dos obtuvo Cambiemos y la restante fue para Carlos Caserio, representante de UNA