“Con esta reforma el kirchnerismo quiere poner jueces adictos para que fallen a su favor”, se quejó ayer el diputado del PRO, Federico Pinedo. “No es un plan integral ni una estrategia, sólo un conjunto de parches improvisados”, opinó por su parte el diputado de la Unión Cívica Radical (UCR) y ex fiscal de Investigaciones Administrativas, Manuel Garrido sobre la reforma judicial presentada por la Presidenta.
El líder de Proyecto Sur, Fernando Pino Solanas, señaló que “el Gobierno busca la mayoría en la Magistratura para nombrar, acusar y destituir jueces”. Patricia Bullrich, legisladora de Unión por todos, destacó: “El kirchnerismo busca modelar los tres poderes. Quiere a la Justicia sometida a su voluntad”.
El senador de la UCR y consejero de la Magistratura, Mario Cimadevilla sostuvo que "acá no está sólo en riesgo el Poder Judicial, está en riesgo la República. Es muy grave lo que está pasando”. Según Cimadevilla, el Gobierno “tiene resabios monárquicos”.
También desde la UCR, Ricardo Gil Lavedra indicó que “los anuncios causan decepción, no apuntan a los aspectos centrales para acercar la Justicia al pueblo”. “Es absolutamente preocupante la modificación al Consejo de la Magistratura. Va en contra del espíritu y la letra de la Constitución”. Por su lado, Francisco De Narváez, precisó: “La Presidenta busca la kirchnerización de la Justicia. ”Vamos resistir el intento de limitar la independencia de la justicia. Están yendo por la Corte”.
El representante del GEN, Jaime Linares, señaló que “este intento de reforma populista sin participación que sigue confundiendo políticas de Estado con políticas partidarias”.
